Pedro Sánchez ha dedicado más tiempo a amenazar con la Constitución que a defender el diálogo. Durante la sesión de control de este miércoles, después de abocar España a elecciones el 10-N, el presidente en funciones ha querido enviar una advertencia al independentismo: "No se equivoquen: si la Generalitat hace cualquier intento de violentar el Estatut y la Constitución, el PSOE aplicará cualquier artículo para defender el Estatut y la Constitución". El aviso a navegantes llega a pocas semanas de conocer la sentencia del Tribunal Supremo sobre los presos políticos.
En respuesta a una pregunta del diputado de ERC Gabriel Rufián, el secretario general del PSOE ha querido remarcar que, a pesar de la abstención anunciada por los republicanos, tienen poco que ver. Y ha tirado del manual de tópicos, cuando se ha mostrado sorprendido para que un partido de izquierdas "defienda la independencia de un territorio rico porque paga mucho en España". Ha reiterado que defenderán "el diálogo, la negociación y la convivencia," pero también el ordenamiento legal. "Si hay un partido constitucionalista es el PSOE", ha remachado.
La pregunta inicial de Rufián era sobre cuál era realmente el proyecto de los socialistas para Catalunya. Y la respuesta de Sánchez ha sido decepcionante para los republicanos. "El mismo que para Extremadura, Castilla y León, Castilla La Mancha, Euskadi, Galicia, la Comunidad Valenciana... Para todos y cada uno de los territorios". Según el dirigente socialista, hay dos cuestiones: la recuperación de la justicia social y la lucha contra la corrupción. En el caso catalán ha añadido "abandonar la crispación" y la defensa de la legalidad.