Una vez constatada que los números no dan por el desacuerdo con Pablo Iglesias, el candidato Pedro Sánchez ha pasado a la ofensiva contra quien tenía que ser su socio. Ha aprovechado la intervención del martes, cuando Iglesias advirtió que si no salía ahora no volvería a ser presidente. "Si para ser presidente tengo que renunciar a mis principios, si tengo que escoger formar gobierno sabiendo que no será útil para mi país, yo no seré presidente ahora", le ha espetado. La segunda votación no saldrá adelante ni siquiera con la abstención anunciada de Unidas Podemos, ERC y EH Bildu. No habrá gobierno de coalición de izquierdas.
La intervención ante el Congreso, que este jueves ha sido de sólo diez minutos, ha llegado después de la última oferta de Unidas Podemos al PSOE, donde rebajaba las expectativas a una vicepresidencia y tres ministerios, que tampoco ha satisfecho a los socialistas. En la sesión de hoy, Sánchez ya ha pasado al ataque. "Si me obliga a escoger entre una presidencia que no sería útil y mis convicciones, escojo mis convicciones", ha asegurado.
Durante su nuevo discurso, el candidato a la investidura ha hecho una lista de todas las cesiones que ha ido haciendo el PSOE, y que Unidas Podemos ha ido rechazando. Incluso ha criticado que los socialistas habían ofrecido cosas que les habían solicitado y que después también lo han acabado rechazado. Además, sobre la última oferta, lo ha tildado de ocurrencia. "Dicen que es para derogar la reforma laboral, como si no supiera que depende de un órgano colegiado como el gobierno de España y de los diputados", ha asegurado.
En este sentido, Sánchez ha afirmado que lo que planteaba era "dos gobiernos en uno", y no "el gobierno coherente y cohesionado" que ha dicho que necesita España. "Aspiro a gobernar, pero no a cualquier precio y a cualquier gobierno", ha cargado. Y ha puesto un ejemplo: "No se puede dejar Hacienda en manos de alguien que no ha gestionado nunca un presupuesto".
También se ha aferrado a otras palabras de Iglesias para rebatirlo. "¿Es humillante ser vicepresidente de derechos sociales? ¿Ser ministro de Sanidad? ¿Ser ministro de vivienda? ¿Ser ministro de Igualdad?", le ha preguntado. En este contexto, ha defendido que, aunque no les gustara, la oferta era "respetuosa, correcta y sensata", y no "humillant".
"El acuerdo no ha sido posible, y lo lamento porque no saldrá adelante un gobierno y por la oportunidad histórica que se desvanece para la incorporación de una fuerza de izquierdas a la izquierda del PSOE en el gobierno de España", ha iniciado el debate. "¿Unirá sus votos en la derecha y la extrema derecha otra vez?", ha concluido Sánchez dirigiéndose a Iglesias.