No es un hecho puntual ni una simple sospecha: el renovado gobierno de Pedro Sánchez no quiere hablar de Catalunya. Así se ha evidenciado, una vez más, en boca del mismo presidente español, que ha comparecido para "rendir cuentas" del cumplimiento de los compromisos y cerrar el curso político convulso, marcado por los indultos. Como síntoma, la secretaría de Estado de Comunicación no ha concedido el turno de pregunta a ningún periodista catalán acreditado en la sala, a pesar de la nutrida presencia. Todavía menos se ha hablado de los indultos ni del conflicto catalán en general. El nuevo guion establece que hay que esquivarlo. Eso sí, se ha colgado "una medalla de oro" por la vacunación, con más del 55% de los españoles con pauta completa.
El presidente del Gobierno solo quería colar un mensaje al respecto —la ausencia del president Pere Aragonès en la conferencia de presidentes de mañana—, y casi se olvida. Lo ha respondido en una pregunta posterior, consciente de que se le había pasado. Y se ha limitado a decir que "lamenta que la voz de Catalunya no esté presente y no sea escuchada". Ha remarcado que son "temas muy importantes" los que se abordan, y que afectan "al conjunto de la ciudadanía catalana, sean independentistas o no". Ha insistido en que es "una pena" y aquí se ha quedado, defendiendo que "desde el punto de vista multilateral y bilateral", su gobierno "cumple con el ejercicio de cogobernanza".
En otro turno de periodistas no catalanes, ha aparecido la cuestión del Tribunal de Cuentas, que ha reclamado un informe a la Abogacía del Estado sobre los avales de l Instituto Catalán de Finanzas. Ha asegurado que "no se pronuncia sobre hipótesis" y que habrá que esperar primero al dictamen del Consejo de Garantías Estatutarias al respecto. Después ya se pronunciarán los servicios jurídicos del Gobierno. Y eso ha sido todo lo que ha dado sobre Catalunya.
En ausencia de Catalunya, gran parte de las preguntas se han centrado en la conferencia de presidentes que tendrá lugar mañana viernes en Salamanca. Han llegado críticas no sólo desde el independentismo, sino de barones del PP por el formato y la falta de preparación previa. Y Pedro Sánchez les ha respondido que "el diálogo en estos momentos es un valor por si mismo" y que su gobierno ha hecho gala de ello: "Se han celebrado 24 conferencias de presidentes; 18 en mi mandato y seis en el resto de mandatos anteriores desde el 2004". En este sentido, ha reclamado "convertir este espacio en un foro de diálogo y no en una lucha partidista que no entendería el conjunto de la ciudadanía". Ha instado a la oposición de la derecha a "optar entre la recuperación o la crispación".
El otro tema que ha acaparado los pocos turnos de pregunta ha sido la renovación de órganos como el CGPJ, el TC o el Tribunal de Cuentas. En este sentido, el presidente del Gobierno ha recordado que "son ya 968 días" los que lleva bloqueada la renovación del órgano de gobierno de los jueces. Y se ha dirigido directamente al Partido Popular: "Que el PP cumpla la Constitución no depende del gobierno. Todos estamos obligados, y más aquellos partidos que se autoproclaman cada día constitucionalistas. Se dice y se hace".
32,8% de compromisos cumplidos
El presidente del Gobierno ha comparecido para exponer su informe semestral de rendición de cuentas, avalado por expertos independientes. Y Sánchez ha presentado las grandes cifras. De todos los compromisos —investidura, pacto de coalición y acuerdos con los grupos parlamentarios—, aseguran que ya han cumplido el 32,8% y que en diciembre de este año prevén haber alcanzado el 38,2%. Se trata de 1.463 compromisos en total: 480 cumplidos, 892 "en proceso", 81 "no iniciados" y diez decaídos. "A pesar del tiempo excepcional que estamos viviendo, el gobierno avanza y cumple sus compromisos", se ha felicitado el dirigente socialista. Y ha aprovechado los tiempos de Juegos Olímpicos para hacer una metáfora: "España es la nación que más ha vacunado entre los 50 países más poblados del mundo. Por encima del Reino Unido, Estados Unidos, Francia y Alemania. España tiene la medalla de oro en vacunación".