El nuevo presidente del gobierno, Pedro Sánchez, ha ordenado que los bancos puedan abordar los pagos de la Generalitat sin supervisión del Ministerio de Hacienda, según ha informado la portavoz y ministra de Educación, Isabel Celaá. La medida se ha tomado después de notificarse el levantamiento del artículo 155, en el primer Consejo de Ministros de Sánchez, con la formación del Govern en Catalunya. Sin embargo, Celaá no ha aclarado si permanecería el control del 2015, relativo al FLA, pero es de esperar que así sea, ya que el acuerdo es previo al introducido por Hacienda con el proceso soberanista. El nuevo gabinete ministerial busca "normalización" con este gesto de "confianza".
Sin embargo, la noticia no supone un cambio sustancial de lo que Mariano Rajoy tenía previsto hacer. Según informaron fuentes del Ministerio de Hacienda del anterior ejecutivo, el control de las cuentas que se fijó en verano del 2017 se levantaría. Este era el mecanismo introducido pocas semanas antes del referéndum, que más tarde se integró al del 155. Ese se extingue ahora. Aparte, Sánchez y Rajoy pactaron en la reunión del pasado 15 de mayo mantener el control relativo al Fondo de Liquidez Autonómica (FLA).
El hecho es que el presidente ve como principal reto la "integridad territorial", es decir "la normalización institucional del país", en alusión al independentismo catalán, para el cual se prevé un enfoque "transversal", ha avisado Celaá. De hecho, el ministro de Exteriores, Unión Europea y Cooperación, Josep Borrell, y la ministra de Administraciones Territoriales y Función Pública, Meritxell Batet, serán el palo y la zanahoria del procés: el primero, contrarrestando el relato de Carles Puigdemont en el exterior, y la segunda, ofreciendo diálogo y distensión en la relación, en yuxtaposición a Sánchez.
Así y todo, Sánchez no ha fijado todavía la fecha para verse con el president Quim Torra, que la portavoz ha equiparado al resto de presidentes de comunidades, cuando ha dicho que el líder socialista se verá en las próximas semanas con todos ellos. Batet también empezará una ronda de contactos telefónicos con los dirigentes territoriales.
Así las cosas, las concesiones al independentismo se descartan de momento. El objetivo es el diálogo, y Celaá ha dicho que no se había tratado el contenido de las materias que hablarán Torra y Sánchez. Sobre los indultos, ha recordado que la causa se encontraba en estos momentos en manos del juez instructor. Sí que ha descartado de forma rotunda la petición de Puigdemont sobre abordar el derecho a decidir.