La detención del president Carles Puigdemont en el Alguer ha pillado a Pedro Sánchez desprevenido. Se encuentra de nuevo en la isla de La Palma, después de un viaje exprés a Nueva York para la asamblea general de la ONU. Desde allí, sin embargo, se ha pronunciado brevemente sobre las noticias que llegan desde otra isla, la de Cerdeña. Como ya es habitual, ha expresado "respeto" por las decisiones judiciales, que debe "someterse a la justicia", pero también ha querido reivindicar el diálogo, "hoy más que nunca". Las declaraciones han tenido lugar menos de una hora antes de la declaración prevista de Puigdemont ante la justicia italiana.
En su declaración institucional sin preguntas, y disculpándose con los habitantes de La Palma por hablar de este asunto, el presidente del Gobierno ha hecho llegar dos consideraciones. La primera, recordar que cuando Puigdemont "huyó", había otro gobierno en La Moncloa y que "este gobierno" siempre ha tenido "la misma posición". Esta posición, ha resumido, es "respeto a todos los procedimientos judiciales en España, en Italia y en Europa," así como las decisiones que se pueda tomar. Y ha añadido en esta misma línea: "Lo que es evidente es que tiene que comparecer y someterse a la justicia".
Dicho esto, el guion de siempre, Pedro Sánchez ha querido añadir una segunda consideración, que también dijo en el Palau de la Generalitat después de la reunión con el presidente Pere Aragonès. "Hoy más que nunca es necesario reivindicar el diálogo, que es la única vía para reencontrarse entre los distintos catalanes y con el conjunto de compatriotas," ha defendido el dirigente socialista. "El diálogo es más necesario que nunca. Lo fue hace diez años, lo fue en el 2017 y lo es hoy", ha insistido Sánchez. Y ha concluido al respecto: "Compromiso y reivindicación del diálogo hoy si cabe más aún".
En la misma línea que el conjunto del Gobierno. Conocida la detención, ya de madrugada, La Moncloa emitía un comunicado expresando "respeto" por la actuación de las autoridades y tribunales italianos y defendía que el presidente "tiene que someterse a la acción de la justicia como cualquier otro ciudadano". Sus ministros han insistido en esta línea. Es el caso de las titulares de Defensa y Ciencia, Margarita Robles y Diana Morant, que también se han esforzado por intentar desvincularlo tanto de la mesa de diálogo como de la inminente negociación de los presupuestos del Estado. "No tiene ningún sentido", ha dicho Robles.
Todo esto es un obstáculo importante en el panorama político que tiene de antemano. La detención del presidente Puigdemont, cuando según la defensa del presidente tendría que tener la euroorden suspendida, llega una semana después de la mesa de diálogo, coja por la ausencia de Junts per Catalunya. Y llega también cuando se inicia la negociación de los presupuestos del Estado, donde los votos de los partidos independentistas serán claves para que Pedro Sánchez vuelva a aprobar unas cuentas públicas. Se añade un nuevo elemento encima de la mesa: la situación de los exiliados que no resolvieron los indultos parciales.
Interior niega que hubiera policía española
Todavía hay muchos zonas oscuras por resolver de la detención de Puigdemont al Alguer, a nivel jurídico y también a nivel logístico. En este contexto, desde La Moncloa niegan que hubiera agentes de la policía española en el aeropuerto de la Cerdeña cuando tuvo lugar la detención, al bajar del avión. Fuentes del Gobierno insisten en que la actuación fue llevada a cabo por la policía italiana sin ninguna intervención de los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado. De momento, Puigdemont está en prisión a la espera de pasar a disposición judicial.
Próxima conferencia en La Palma
Pedro Sánchez ha comparecido nuevamente desde la isla de La Palma, desde donde ha anunciado un plan especial de reconstrucción de la isla canaria para hacer frente a la erupción del volcán Cumbre Vieja, tanto a las necesidades inminentes como a la reconstrucción futura. Así, ha anunciado que el martes el Consejo de Ministros declarará la zona catastrófica. Y también, un gesto: que la próxima conferencia de presidentes autonómicos se celebrará en diciembre en La Palma.