Pedro Sánchez se equivocó cuando reivindicó su poder sobre la Fiscalía para extraditar a Carles Puigdemont. Así lo ha admitido el mismo presidente en funciones este jueves, después de las fuertes críticas de las asociaciones de fiscales e incluso la enmienda de la Fiscalía General del Estado. "La verdad es que no fui preciso", ha lamentado el dirigente socialista, que ha dicho que lo que quería decir es que el gobierno dará todo el apoyo al poder judicial para que consiga extraditar al president en el exilio y que pueda "dar cuentas" ante el Tribunal Supremo.
En una entrevista este jueves en La Sexta, Pedro Sánchez ha rectificado asegurando que "el nombramiento depende del gobierno de España, pero la Fiscalía es autónoma". En este sentido, ha admitido el error y lo ha atribuido a las "muchas horas delante de un micrófono y de una pantalla" durante la campaña y a "expresiones de debates electorales". "A veces no se es preciso", ha señalado. Ha defendido que siempre ha "respetado" la autonomía de la Fiscalía. "A lo que se compromete el gobierno de España es a ayudar a que vuelvan a España y rindan cuentas", ha insistido el secretario general del PSOE.
En cuanto a la respuesta de las autoridades británicas sobre la orden de detención contra Clara Ponsatí, el presidente en funciones ha querido dejar claro que "no fue la justicia británica", sino la policía. También ha subrayado que acabaron rectificando, simplemente pidiendo "más información sobre la sentencia", y que su gobierno ha recibido disculpas del gobierno británico a través del embajador.