Toda la maquinaria está a punto para los indultos a los presos políticos independentistas. Y Pedro Sánchez quiere explicarse y justificarse. Por eso, este lunes presentará la medida de gracia delante de la sociedad catalana. Según ha adelantado La Vanguardia y ha podido confirmar ElNacional.cat, lo hará en un gran acto en el Teatro del Liceu de Barcelona, que reunirá a 300 invitados de la sociedad civil catalana. El título del acontecimiento: Reencuentro, un proyecto de futuro para toda España. De esta manera, todo indica que los indultos podrían ser aprobados el martes que viene por el Consejo de Ministros.

El acto ha sido comunicado al president de la Generalitat, Pere Aragonès, y pretende escenificar la nueva etapa de distensión entre los dos gobiernos. Ya hubo un primer momento, ahora hace diez días, en un acto en Foment del Treball donde coincidieron Pedro Sánchez y Aragonès. Y la agenda en la capital catalana se intensifica, con la presencia este viernes en la reunión del Cercle d'Economia. El gran acto del lunes en el Liceu tendrá lugar a las doce del mediodía. Además de los indultos, Sánchez podría hablar de la reactivación de la mesa de diálogo.

Sin embargo, desde el ejecutivo aún no quieren confirmar la fecha de los indultos. En rueda de prensa este jueves desde La Moncloa, tras la reunión de Sánchez con el presidente andaluz Juanma Moreno, la portavoz María Jesús Montero se ha limitado a decir que será "pronto". Ha defendido que la voluntad del Ejecutivo central "no tiene tanto que ver con la situación concreta de cada persona, como con dar paso por la convivencia, la concordia y el diálogo con Catalunya".

Este acto llega tan sólo una semana después de la manifestación de la triple derecha en la plaza de Colón, emulando nuevamente la de febrero del 2019 contra la mesa de diálogo. Como la de hace dos años, fue capitalizada por la extrema derecha de Vox, y con una participación todavía menor: la mitad. En paralelo, la campaña de recogida de firmas contra la medida de gracia iniciada por el PP, emulando las mesas contra el Estatut, también queda lejos de las firmas que consiguió en la iniciativa original. Todo esto, una pista de aterrizaje para Pedro Sánchez, que también tiene pendiente la reforma de la sedición. También cómo queda la situación del president Carles Puigdemont y los consellers en el exilio, que evidencia discrepancias dentro del propio Gobierno.

Indultos "para la sociedad catalana"

Este mismo miércoles, Pedro Sánchez volvió a hacer pedagogía, en una comparecencia conjunta con la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen. El presidente del Gobierno ha defendido que no toman esta decisión "para los afectados, sino para la sociedad catalana y española", porque "tenemos que construir convivencia y concordia". Volvió a dirigirse a los que puedan tener reservas ante la medida de gracia: "Les pido un voto de confianza, que entre todos hagamos un ejercicio de magnanimidad y podamos mirar hacia el futuro".