El exsecretario general del PSOE Pedro Sánchez ha decidido renunciar al acta de diputado a pocas horas que Mariano Rajoy sea investido presidente. Lo ha hecho a través de una rueda de prensa con llanto contenido y "dolorosa" decisión. Con los sentimientos a flor de piel, "no hay mejor manera de coser al PSOE que uniendo las voces de la militancia en el próximo congreso del partido", ha asegurado. Ha sido entonces cuando el socialista ha estallado en lágrimas de emoción durante diez segundos después de haber liderado el "no es no" y verse obligado a marcharse ante su peor pesadilla, Rajoy de presidente. "Creo que es la salida más honrosa, durante semanas he defendido los valores del socialismo", se ha lamentado. "Hay que entender lo doloroso que ha sido tomar la decisión", decía mientras se disculpaba por los errores cometidos.
Después de muchos días reflexionando, Sánchez ha preferido marcharse antes que votar no y desobedecer el mandato del comité federal o abstenerse. Aun así ha insinuado que podría presentarse para liderar el partido y también ha tirado un dardo a la gestora, pidiendo que convoque primarias y que no expulse a nadie que vote no esta tarde.