Pablo Casado se quejaba de que ni siquiera recibía llamadas de Pedro Sánchez. Para que no fuera dicho, el presidente español ha llamado este martes al jefe de la oposición, mientras el Congreso debatía la reforma para limitar las funciones del CGPJ. Sin embargo, a pesar de los 45 minutos de conversación, las posiciones no se han movido. Sánchez le ha vuelto a hacer un llamamiento para "cumplir íntegramente la letra de la Constitución del 78". No obstante, según fuentes de La Moncloa, "la conversación no ha permitido avances" y se mantiene el candado de Génova a la renovación. Entre las condiciones de los populares, que Podemos salga de la ecuación o que haya un compromiso de no conceder indultos a los presos políticos. Y no se ha movido de aquí. Mientras tanto, el equipo de Carlos Lesmes lleva más de dos años con el mandato caducado.
Así, según informan desde el ejecutivo, el presidente del Gobierno ha conversado esta tarde con Pablo Casado "con el objetivo de desbloquear la renovación de diversos de los principales órganos constitucionales". La llamada ha sido efectuada desde La Moncloa, se ha alargado durante unos tres cuartos de hora y ha sido "cordial". Pero, según el gobierno, "no ha permitido avances y sólo ha servido para comprobar que la posición de bloqueo del PP sigue siendo la misma".
El principal mensaje que ha trasladado Pedro Sánchez: que está "dispuesto a llegar a llegar a acuerdos de país" con el PP y la necesidad de "cumplir con el mandato constitucional de renovar órganos tan importantes" como el CGPJ, el Tribunal Constitucional, el Defensor del Pueblo y el Consejo de Administración de RTVE. Le ha recordado como algunos de estos, como es el caso del poder judicial, hace más de dos años que tienen el mandato caducado y que están en funciones desde entonces.
En cambio, desde el PP subrayan que han pasado 55 días desde la última llamada entre los dos. Fuentes de la dirección estatal explican que Casado "ha vuelto a reiterar sus condiciones", que pasan por "un acuerdo PP-PSOE sin Podemos y que se refuerce la independencia judicial". Más allá de eso, le ha reclamado una gestión "profesional e independiente" de los fondos europeos. También le ha expresado su "preocupación por los ataques en la Corona y el blanqueo de Bildu e independentistas que se produce desde el gobierno".
Mandato caducado pero nombrando
El Consejo General del Poder Judicial tiene el mandato caducado, pero sigue con su actividad como si nada. En las últimas semanas, el pleno del CGPJ de Carlos Lesmes ha nombrado a tres nuevos magistrados de la sala de lo penal del Tribunal Supremo. En este caso, el acuerdo pasó por dos jueces progresistas y uno conservador. También renovó tres presidencias de sala del alto tribunal. En funciones se han renovado todas las salas del Supremo, incluida la renovación de Manuel Marchena al frente de la sala de lo penal. Ya son más de 50 los nombramientos que ha hecho el órgano de gobierno de los jueces desde que está en funciones a la espera de renovación.
Justamente hoy el Congreso ha puesto la primera piedra para limitar las funciones del CGPJ con el mandato caducado, a través de una reforma impulsada por el PSOE y Unidas Podemos. La iniciativa ya ha puesto en marcha su trámite parlamentario.