Pedro Sánchez se ha mostrado este martes tranquilo cuando, en una rueda de prensa desde la India, se le ha preguntado sobre la nueva imputación a su esposa. Juan Carlos Peinado ha admitido a trámite una nueva querella de Hazte Oír contra Begoña Gómez por los delitos de apropiación indebida e intrusismo profesional por, supuestamente, haberse quedado un software de la Universidad Complutense de Madrid. "Son las mismas organizaciones ultraderechistas que presentan una querella, y el mismo recorrido; cada vez más convencido de que el tiempo pondrá las cosas en su sitio", ha aseverado el presidente del Gobierno desde Bombay. Ante la insistencia de los periodistas con este tema, el líder socialista ha asegurado que a su esposa "se le acusa falazmente". "Tengo confianza en el estado de derecho; de donde no hay nada, nada se puede sacar", ha señalado el jefe del ejecutivo español.

 

El juez ha citado la investigada para que comparezca en el juzgado el próximo día 18 de noviembre, a las 13:30 horas, con el fin de darle traslado personal de la querella y que declare como investigada, y asistida por un abogado. El juez Peinado ya investigaba a Begoña Gómez por los delitos de tráfico de influencias y corrupción en los negocios, y ahora ha acordado "acumular" la nueva denuncia en la causa principal. Para la primera investigación, el magistrado fue a la Moncloa para interrogar como testigo al presidente socialista, que se acogió a su derecho a no declarar contra su esposa. Por este motivo, la Abogacía del Estado presentó una querella contra el magistrado en el Tribunal Supremo, al considerar que la investigación es porque es su mujer, con el apoyo de la Fiscalía. Gómez también presentó una querella contra el juez Peinado, que en este caso la Fiscalía no comparte. Las dos querellas han sido rechazadas.

"Total confianza" en Yolanda Díaz y Mónica García

Desde la capital comercial de la India, el líder socialista también ha aprovechado para trasladar su "total confianza" en la vicepresidenta segunda del Gobierno, Yolanda Díaz, y la ministra de Sanidad, Mónica García, por el caso Errejón. Aunque el escándalo ha hecho estallar una crisis en el espacio —hasta el punto que la líder de Sumar ha tenido que reconocer finalmente que sí que se le había informado sobre la presunta agresión sexual de 2023—, el presidente del Gobierno ha cerrado filas con Sumar y Más Madrid. "Han actuado de forma contundente desde el primer momento", ha defendido el líder socialista aplaudiendo "el compromiso incuestionable con la causa feminista" de estas dos ministras que integran su ejecutivo.

Minutos antes de esta comparecencia ante los medios de comunicación, la portavoz del Gobierno también ha cerrado filas con Yolanda Díaz. El argumento ha sido el mismo, que coincide con el que utilizan los socialistas con el caso Koldo-Ábalos: el machismo y la corrupción no entienden de ideologías; la diferencia radica en cómo responde una formación política o un ejecutivo a ello. Este martes, Pilar Alegría ha destacado la "inmediatez" con la que se fulminó a Íñigo Errejón de todos sus cargos públicos y orgánicos una vez se publicaron las denuncias por agresión sexual.

El presidente y los ministros del PSOE están omitiendo, de momento, que Díaz ofreció este lunes una rueda de prensa en el Congreso de los Diputados en la que admitió haberse desentendido de una denuncia de este tipo en junio de 2023. La líder de Sumar cargó el muerto a Más Madrid; incluso también a la víctima. "Lo archivaron; ella borró el tuit", manifestó en aquella comparecencia.