El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, puso rumbo a la recuperación de contacto entre el Gobierno y la Moncloa con una conversación telefónica de unos 40 minutos con el presidente de la Generalitat, Pere Aragonès. A pesar de la larga llamada no se concertó todavía ninguna fecha concreta para emplazar una reunión para dar el pistoletazo de salida al diálogo. En cambio hoy se ha podido saber que Sánchez ya ha cerrado una reunión con el presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, para el próximo 17 de junio a las 12 horas en la Moncloa, según ha anunciado el Gobierno.
Quejas de Andalucía
La fecha de la reunión entre Gobierno y la Junta andaluza se ha fijado después que el gobierno andaluz expresara sus quejas públicamente porque Moreno no ha sido todavía recibo por el presidente español, pero en cambio ya se hablara de una entrevista todavía sin fecha concreta con el presidente de la Generalitat.
La portavoz del gobierno andaluz, Elías Bendodo, ha argumentado que Juanma Moreno "lleva dos años esperando la cita" con el líder del ejecutivo español. "Me parece magnífico que Sánchez reciba en Aragonès, pero todavía no ha tenido el bien recibir a Moreno esta legislatura", apunta. Bendodo critica que "la Junta de Andalucía lleve pidiendo una cita con Sánchez desde febrero de 2019".
En este sentido, Sánchez ha actuado ante las quejas de Bedondo y ha cerrado la fecha para una reunión con Juanma Moreno, dando preferencia a la comunidad andaluza a pesar de la urgente necesidad de "compartir el objetivo de avanzar hacia la superación de los retos comunes mediante el diálogo" con Catalunya, según fuentes conocedoras de la llamada.
Los 9 indultos
La esperada cita entre Sánchez y Aragonès coincide con la polémica en España por la posible concesión de los indultos a los presos políticos independentistas por parte del Gobierno. Aunque el Gobierno se ha mostrado a favor de los 9 indultos porque supondrían un respiro para los represaliados. Aragonès ha advertido que "la exigencia seguirá siendo la amnistía, porque los indultos no resuelven el problema de fondo".
En paralelo, la Moncloa ya ha hecho saber, por boca del ministro Iceta, que su propuesta para la resucitada mesa de diálogo será recuperar la denominada Agenda para el Reencuentro que planteó Sánchez al presidente Quim Torra ahora hace más de un año.
Antes, diálogo en Catalunya
Al respecto, el PSC también tiene alguna cosa que decir, y ha instado al Gobierno a reunir una mesa de diálogo entre partidos catalanes antes no se reúnan con el ejecutivo español. Los socialistas catalanes piden "establecer un foro de intercambio de posiciones de ideas, de opiniones y opiniones, de sentimientos, donde estén representadas todas las fuerzas escogidas democráticamente en las últimas elecciones en el Parlamento"
Aragonès ha concretado que reunirá los partidos y las entidades independentistas y que quiere activar el acuerdo nacional para la amnistía y la autodeterminación, espacios donde el PSC no tiene cabida por su posicionamiento contra el procés. "La mesa de diálogo entre los partidos que representamos a los ciudadanos y ciudadanas de Catalunya es esencial para buscar el reencuentro social y una salida al conflicto político en el cual Catalunya ya lleva demasiado tiempo inmerso. El acuerdo entre España y Catalunya pasa primero porel acuerdo entre catalanes y catalanas", aseguran los socialistas.