El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha propuesto como solución al actual conflicto entre Catalunya y España ofrecer "un referéndum de autogobierno, no de autodeterminación”, asegurando que en estos momentos, “lo que està en juego en Catalunya no es la independencia, es la convivencia”.
“Cuando hablamos de autogobierno hablamos de un nuevo Estatuto”, ha querido aclarar el presidente del Gobierno, porque Catalunya, “ahora mismo tiene un Estatuto que no votó”. Así pues, sin concretar más, Sánchez propone la aprobación de un "nuevo Estatuto de autonomía" para Catalunya.
Entrevistado en la Ser al inicio del curso político, Sánchez ha insistido en que su Ejecutivo afronta la crisis en Catalunya con “la ley y una voluntad inequívoca de dialogar”, pero al mismo tiempo ha instado al president Torra “a abrir el diálogo con la otra mitad de Catalunya”.
Trascender la dinámica de bloques
Abundando en la situación catalana, Sánchez ha querido recordar que en el referéndum de independencia del 1 de octubre “participó el 43 por ciento”, mientras que en las elecciones del 21 de diciembre, forzadas por la liquidación del autogobierno catalán con la aplicación del artículo 155 de la Constitución, votó “el 79 por ciento”. Por ello, Sánchez ha concluido que “la sociedad catalana está dividida en dos bloques y que hay que trascender la dinámica de bloques para resolverlo”.
Por ello, el presidente español ha reiterado que su Gobierno tiene “voluntad de explorar todas las opciones para resolver esta crisis, respetando la legalidad”, lo que desmbocaría en una propuesta de nuevo Estatuto.
Sin prisa para un nuevo 155
En cuanto a la posibilidad de celebrar un Consejo de Ministros en Barcelona, Sánchez ha señalado que éste tendría lugar entre “octubre y novembre”, añadiendo que una eventual aplicación de nuevo del articulo 155 de la Constitución requiere de unos hechos que no se han producido, puesto que de momento solo hay “retórica inflamatoria por parte de los independentistas”.
Con todo, ha señalado que el independentismo “no debe repetir los errores del otoño de 2017”, para añadir que “con independencia de lo que diga el president Torra, el Gobierno de España no se levantará de la mesa de las comisiones bilaterales”.
Autonomia de la fiscalía
Además, Sánchez ha recordado a la Generalitat que la fiscalía tiene autonomía para realizar su trabajo, después de algunas peticiones realizadas desde el Ejecutivo catalán y el independentismo para que el ministerio público cambie la calificación y no acuse de rebelión a los soberanistas presos.
El presidente español ha dejado claro que su Gobierno tiene que respetar la autonomía del poder judicial, que la autonomía de la Fiscalía General está recogida en la Constitución y que lo importante para resolver la situación es aplicar "ley y diálogo".