Las negociaciones en Catalunya para investir a un nuevo president de la Generalitat han llegado al Congreso de los Diputados. Pedro Sánchez ha aprovechado una pregunta de Gabriel Rufián durante la sesión de control al Gobierno para verbalizar su deseo de llegar a un entendimiento con Esquerra Republicana para permitir que Salvador Illa sea el sucesor de Pere Aragonès. “Ojalá podamos entendernos en Catalunya porque merece la pena que podamos hacer gobiernos transversales, donde el progreso, los derechos sociales y la convivencia primen sobre otras cuestiones, pero esto se tendrá que decidir en el Parlament de Catalunya”. Cuando ha salido del hemiciclo, a preguntas de los periodistas, se ha limitado a contestar que “todos los caminos pasan y llegan a Illa”.

 

Durante su intervención, Sánchez también ha reiterado su compromiso de presentar un paquete de calidad democrática ante las Cortes Generales antes del final de verano. Esta promesa responde a su voluntad de trabajar en la “regeneración democrática” que abanderó en su primera carta a la ciudadanía. Además, el líder socialista ha puesto en valor la “asociación estratégica” que ha mantenido el PSOE con ERC en los últimos seis años en Madrid en “todo lo que tiene que ver con el avance en derechos sociales”. “Es algo que aprecio y valoro y que reitero para los próximos”, ha verbalizado Sánchez.

Gabriel Rufián: “Algún día colará que la derecha española pacte a la vez con la ultraderecha y la derecha catalana”

La pregunta que Gabriel Rufián ha planteado a Pedro Sánchez ha sido, en buena parte, un dardo envenenado dirigido a Junts per Catalunya. El enunciado era claro: “¿Teme usted una moción de censura?”. Una pregunta que llega una semana después de que Alberto Núñez Feijóo no descartara una moción de censura contra Sánchez con el apoyo de Junts. “Hay que tener el contexto adecuado y pensar que puede ser útil en ese contexto”, reconoció el líder del PP. Y Rufián ha querido poner el dedo en la llaga. El portavoz de ERC en el Congreso ha hecho tres vaticinios sobre futuros pactos entre el PP y Junts: “De momento, no cuela que la derecha española pacte a la vez con la ultraderecha y la derecha catalana, no cuela que Feijóo pacte con Puigdemont para echarlo a usted por pactar con Puigdemont y no cuela que si algunos pactan con el PSOE, somos unos traidores, pero si algunos pactan con el PP, son unos estadistas”. “Pero algún día colará”, ha remachado Rufián al final de cada pronóstico.

 

Además, el líder republicano en Madrid ha pedido a Sánchez que haga algo más que “jugar al malmenorismo” y le ha vuelto a reclamar medidas concretas de regeneración democrática. “Más allá de mandar cartas a la ciudadanía, tiene el BOE”, le ha recordado, y ha señalado en diferentes direcciones: “Votemos mañana los vocales del CGPJ, vetemos de la contratación pública a empresas privadas que han colaborado con la maquinaria del fango y aumentemos multas por difamar y mentir”.

En su réplica, Sánchez ha reconocido que, de “personas desesperadas” como Feijóo, se “teme cualquier cosa” y, sobre la moción de censura, ha declinado “aportar mucho más a un debate que está acabado”. Eso sí, le ha reprochado a Rufián que el apoyo de ERC a Josep Rull para presidir el Parlament de Catalunya es “algo contradictorio” con “su voluntad de entendimiento con las fuerzas parlamentarias progresistas” en el Congreso.