El goteo de bajas de Ciudadanos sigue en el Congreso de los Diputados. La opa del Partido Popular se está haciendo notar. La formación de Inés Arrimadas continuará con nueve diputados en la cámara baja (si no hay más deserciones), pero se ha producido una nueva salida. Hoy ha sido la diputada Marta Martín quien ha desertado. Ha renunciado al acta, y por lo tanto la formación retendrá el escaño sustituyéndola. Este nuevo movimiento llega después de la dimisión de Toni Cantó y la deserción de otro diputado en el Congreso y de dos senadores. Los tres han pasado al Grupo Mixto. Aún persisten las réplicas del terremoto murciano y madrileño.

En un mensaje en su cuenta de Twitter, Marta Martín, diputada por Alicante, ha anunciado que renunciaba al acta. "Yo cumplo mis compromisos y espero que los que se queden cumplan el compromiso que me han dado", ha asegurado después de hablar con la dirección. "Que este escaño no sirva nunca para dar alas ni al nacionalismo ni a la corrupción", ha deseado. La diputada fue pillada por El Español cenando ayer con los dos senadores que también han desertado y con el exsecretario de organización Fran Hervías, que se ha pasado al Partido Popular.

Al renunciar al acta, Ciudadanos mantendrá el escaño de Marta Martín. No es lo que pasó ayer con el diputado Pablo Cambronero, que anunció que abandonaba el grupo parlamentario y pasaba al Grupo Mixto como diputado no adscrito. "No puedo pertenecer a un partido, mejor dicho, ponerme a las órdenes de una dirección de partido que en plena pandemia dedica su tiempo a realizar estas estrategias o pactos que no comparto. No puedo justificar ni defender una cosa en la cual no creo", argumentaba Campronero.

También ha habido movimientos en el Senado. El primero en marcharse fue el senador Emilio Argüeso Torres, que anunció que dejaba Ciudadanos para pasar al Grupo Mixto después de que el partido le abriera un procedimiento de expulsión. También ayer, la senadora de Cs por Navarra, Ruth Goñi, anunció que salía del partido para pasar al Grupo Mixto con la intención de seguir defendiendo "las ideas" por las que "les votaron los navarros" el año 2019.

De hecho, con estas dos bajas en el Senado, Ciudadanos podría perder el grupo parlamentario propio en la cámara de representación territorial. Eso implicaría no sólo pérdida de representatividad, sino que también dejarían de percibir 15.200 euros mensuales como asignación fija destinada a los grupos parlamentarios. Su situación se revisará al final del periodo de sesiones. También podrían recibir senadores prestados por otros grupos para salvar los muebles.