Sant Cugat del Vallès ha declarado persona non grata a Pablo Llarena, magistrado del Tribunal Supremo. La moción, presentada por Junts per Sant Cugat, ha contado con el apoyo de Esquerra Republicana y la CUP, sumando de esta manera 18 votos favorables de los 25 concejales que conforman el plenario del consistorio santcugatense. En contra votaron el PSC (que forma equipo de gobierno con ERC y la CUP), Ciudadanos y una concejala no adscrita. Hace diez meses, ya se sometió a votación una moción que planteaba declarar persona non grata al juez, que tiene una vivienda en Sant Cugat, pero entonces ERC votó en contra, hecho que impidió que la propuesta saliera adelante.
La moción era relativa al dictamen de la Organización de las Naciones Unidas, que denunció la vulneración del derecho político de los presos del 1 de octubre. Entre los acuerdos de esta, más allá de la proposición de declarar persona non grata a Llarena, figuraba que el Ayuntamiento se sumara al apoyo a la reparación "integral y efectiva" de estas vulneraciones. Otros puntos son que se constata que "la democracia no rige en plenitud en Catalunya" o que el consistorio afianza su compromiso "de promover activamente la calidad institucional, la defensa de la democracia y el derecho a la autodeterminación" de Catalunya.
Roce entre ERC y Junts
A pesar de votar a favor, los republicanos han reprochado a Junts su "actitud". Esther Madrona, teniente de alcaldía, ha considerado que la moción "no busca una voluntad política, ética o moral" y, según ella, queda demostrado en el hecho de que Junts "no quiere sentarse con los otros partidos independentistas para buscar un consenso". Desde ERC, ven un intento "constante en cada pleno" por parte de Junts de "demostrar quién es más independentista", pero creen que no están haciendo "propuestas concretas" para alcanzar el objetivo: "Mientras tanto, nosotros seguiremos trabajando por la independencia", ha expresado Madrona. La concejala republicana ha denunciado "el intento de fragmentar el gobierno" municipal, pero sostiene que eso no pasará: "Cada uno de los partidos que lo formamos tenemos claro aquello que nos une y aquello que nos puede separar un poco". En ERC tampoco ha gustado que a la moción se haya citado a Raül Romeva "sin haber hablado con él".
Desde Junts, en su turno de réplica, el concejal Carles Brugarolas ha expresado que la reacción de ERC lo ha dejado "azorado": "Cuando nosotros hacemos mociones, lo hacemos pensando en la ciudad y el interés de la ciudadanía, y no pensando en atacar a un partido u otro". Por parte de la CUP, Oriol Sánchez, ha defendido la posición de su grupo en la moción en el hecho de que "siempre defenderemos la lucha contra la represión". "Se constata que la justicia española es una justicia de parte, parcial y que su finalidad es restablecer el orden tanto territorial como económico", ha remachado el cupaire.