Societat Civil Catalana (SCC) ha presentado este lunes una encuesta elaborada por GAD3 de la que se desprende que el modelo de inmersión lingüística que propone la Generalitat de Catalunya solo es apoyado por un 9 por ciento de los catalanes frente a una mayoría que pide un modelo de enseñanza que garantice el trilingüismo. Los resultados son sorprendentes porque no coinciden con ninguna anterior.
Los resultados del estudio de la entidad españolista han sido explicados en rueda de prensa en el Senado por la consultora de GAD3 Itziar Francín, quien ha estado acompañada por el presidente de SCC, Fernando Costa, la presidenta de Asamblea por una Escuela Bilingüe, Ana Losada, y respaldados por el Grupo Parlamentario Popular.
Los principales resultados del estudio recogen que si se les pregunta por cómo debe ser el idioma en la enseñanza, la mayoría (53,5%) cree que debe instalarse un sistema trilingüe con proporciones variables de castellano, catalán e inglés y le sigue un 21,4% que piensa que debe haber un bilingüismo equitativo (catalán y castellano en proporciones parecidas).
El estudio ha sido realizado entre el 30 de noviembre y el 9 de diciembre a una muestra formada por 1.002 personas residentes en Catalunya por vía telefónica. Además, ha dejado claro que "las personas a las que se les pregunta nunca mienten".
Costa ha insistido que esta encuesta revela que la "voz del nacionalismo no expresa bien lo que quieren los catalanes". Así se ha referido a otro resultado como que el 59,9% de los encuestados cree que la primera lengua de contacto educativo de los niños en las escuelas públicas y concertadas de Catalunya, debería ser la lengua familiar de los padres, ya sea catalán o castellano.
También se han sometido a sondeo otras afirmaciones como la necesidad de que para reforzar el currículum del estudiante, a nivel internacional, sería conveniente una prueba de nivel de español común a nivel estatal al final de ESO. Sobre esta cuestión se han mostrado muy de acuerdo un 61,1 por ciento de la muestra.
En este sentido, Losada ha criticado que la prueba final a la que se someten los alumnos de ESO y que evalúa su nivel de castellano es elaborada por la Generalitat. "Los derechos no se evalúan en un examen", ha proseguido, para después poner en cuestión lo que hay detrás de estas encuestas. "Hay tantas evidencias que este debate se tiene que abrir de una forma serena", ha enfatizado.
La encuesta también revela que el 80 por ciento no considera que exista discriminación por razón de lengua en Catalunya y que un 60 por ciento piensa que el actual modelo lingüístico no perjudica la vida personal o laboral. También se ha deslizado que el 82 por ciento no cree que se deba multar establecimientos por no rotular en catalán.
Costa ha comentado que este resultado sobre la discriminación es una muestra de la transparencia de los resultados, pero ha insistido en que un 20 por ciento significa que dos millones de personas se sienten discriminadas por motivos lingüísticos.
Sentencia del TSJC
"Esta encuesta demuestra que los catalanes mayoritariamente coinciden con los tribunales y con la Constitución. Eso es muy importante porque el Govern siempre dice hablar en parte de una parte de Catalunya y esta vez ni eso, hablan en nombre de ellos", ha apostillado Losada tras la exposición de los resultados.
Así, ha añadido que la realidad de hoy que hay "una sentencia clara" que habla sobre cómo el Tribunal Superior de Justicia de Catalunya esclarece que "la Generalitat está excluyendo el castellano de la escuela".
En esta clave, ha hecho un llamamiento al Gobierno central para que pida que se aplique la sentencia del Tribunal Superior, así como esta encuesta, y se incluya el español como lengua vehicular. "Hay suficientes elementos para que el Gobierno reaccione", ha remarcado.
Costa ha manifestado que "aquello que la Generalitat presenta como un ataque a la escuela catalana, que es un 25 por ciento de español, en realidad la mayoría de catalanes considera que es insuficiente". "No queremos que el trilingüismo sea un privilegio de élites, sino que sea un derecho de todos los catalanes", ha añadido para después pedir que ninguna lengua sea tratada como extranjera.