Fèlix Millet y Jordi Montull han sido condenados a 9 años y 8 meses de cárcel, y 7 años y 6 meses de cárcel, respectivamente. Además, Millet tendrá que pagar 4.120.540 euros de multa por blanqueo de capitales y delito contra la hacienda pública. Y Montull, 2.998.284 euros.
Además de la multa, Millet y Montull tienen que devolver el dinero que se quedó en el Consorcio del Palau de la Música, la asociación Orfeó Catalá y en la fundación Orfeó Català-Palau de la Música, en total 23 millones de euros. También tienen que pagar a Hacienda 677.904 euros.
CDC tendrá que pagar las ganancias que obtuvo de todo el expolio, que están valoradas en 6.676.105 euros. Su extesorero Daniel Osàcar ha sido condenado a 4 años y 5 meses de prisión y a una multa de 3.796.555 euros.
Con respecto a Gemma Montull, el pacto con la Fiscalía no ha tenido suerte y la hija de la mano derecha de Millet ha sido condenada a 4 años y 6 meses de prisión y una multa de 2.663.955 euros.
La condena es por el delito continuado de malversación de dinero público y apropiación indebida en concurso medial con delito continuado de falsificación en documento mercantil cometido por funcionario público, delito continuado de tráfico de influencias, delito de blanqueo de capitales y contra la hacienda pública.
La sentencia también condena a las mujeres de Millet y Montull a pagar casi 7 millones de euros como responsables civiles subsidiarias. Esta resolución incluye también a Laia Millet, que realizó su boda en el Palau de la Música.
El tribunal absuelve a Rosa Garicano, exdirectora del Palau de la Música, y los directivos de las empresas Ferrovial y Publiciutat porque los hechos han prescrito. Ferrovial era el canal para el tráfico de influencias y pago de comisiones entre el Palau y CDC.
Son las grandes cifras de la sentencia del caso del expolio del Palau de la Música. Una sentencia que no es firme y que se puede recurrir en el Tribunal Supremo.
El expolio según la sentencia
El entramado, según consta en la sentencia, que iniciaron Fèlix Millet, Jordi Montull y Gemma Montull, permitió el destino ilegal de más de 23 millones de euros, el desvío para finalidades privadas (obras en domicilios particulares, viajes privados, financiación de enlaces matrimoniales, compra de bienes) de cantidades millonarias, el pago de comisiones a Convergència Democràtica de Catalunya, el pago de facturas por servicios no prestados, la prestación de recibos por pagos no correspondientes, así como el correspondiente fraude a Hacienda para la liquidación irregular de los movimientos de dinero que o no eran reales o no correspondían a la explicación que los justificaba, ingresos y donaciones que ocultaban el verdadero origen y finalidad del dinero.
Según la resolución judicial, Fèlix Millet y Jordi Montull, contando desde diciembre de 2003 con la indispensable contribución de Gemma Montull, "pusieron en práctica una estrategia encaminada a disponer, ilícitamente, de cuantiosos fondos de asociación, fundación y consorcio, para aplicarlos bien a gastos particulares de ellos o sus familias, bien a fines desconocidos, pero en todo caso ajenos por completo a los fines e intereses propios de los entes a los que estos fondos pertenecían". El total de disposiciones de fondo en efectivo efectuadas entre los años 2000 y 2009 por orden de Fèlix Millet y Jordi Montull, realizadas con cargo en las cuentas bancarias de la fundación y la asociación, ascienden a poco más de 23 millones de euros.
En el relato de hechos probados se recoge que con fondo de la fundació, la asociación y el consorcio, Fèlix Millet y Jordi Montull hicieron frente a importantes gastos particulares, provocándose un enriquecimiento injusto. Y entre estos gastos señala, por ejemplo, los enlaces matrimoniales de las hijas de Fèlix Millet entre los años 2000 y 2002. "El total de fondos de la fundación indebidamente destinados a sufragar las ostentosos enlaces de las hijas de Fèlix Millet fue de 164.269,93 euros", afirma el tribunal en su resolución. Y añade que en el capítulo de abono de viajes privados corresponderían 648.021,85 euros. La cantidad sustraída por obras en viviendas particulares sería de más de un millón de euros.
Fèlix Millet y Jordi Montull abonaron, irregularmente, una cantidad mensual a determinadas personas que realizaban unas, no concretadas, colaboraciones con las actividades del Palau de la Música, pagos que ascendían a un total de 719.758,45 euros. De igual forma, un total de 778.428,85 euros fueron destinados al pago de facturas de Viajes Baixas para viajes privados de Fèlix Millet y Jordi Montull con sus familiares. Un total de 3.741.898,82 euros fueron entregados a terceros en pago de adjudicaciones de obra pública en la que ellos mediaron. Y por esta mediación Millet y Montull percibieron comisiones por un importe total de 3.453.288,19 euros, que se repartieron al 80-20% y que obtuvieron en su práctica totalidad mediante el cobro de cheques.
La cantidad de fondo en efectivo que los imputados sustrajeron de las cuentas de la fundación y asociación entre 2002 y 2009 para aplicarlos a finalidades externas a las propias del Palau de la Música, integrándola en su patrimonio o en el de terceros, sube a 14.366.555,46 euros. De este importe total, al menos siete millones de euros se los apropió Fèlix Millet, incorporándolos a su patrimonio. Por su parte, Jordi Montull hizo lo propio con un mínimo de 1.300.000 euros. Se desconoce el destino final del resto del fondo, que llega a 6.026.866,85 euros, y en qué proporción salió de las cuentas de la fundación y asociación, cantidad que, en todo caso, ha resultado acreditado que no fue destinada a alimentar los fondos de ninguna de las entidades del Palau, ni a sus cuentas de caja, ni al cumplimiento de los fines sociales propias del Palau de la Música.
El "acuerdo criminal" con CDC
Una de las acciones a través de las que Millet y Montull buscaron y obtuvieron enriquecimiento particular a costa de los fondos de la asociación y fundación, fue su mediación para el establecimiento, mantenimiento y funcionamiento de un sistema por el que la sociedad Ferrovial-Agroman, mediante el pago de comisiones a la formación política de CDC, obtenía la adjudicación de determinados concursos y licitación para la construcción de obra pública en Catalunya, concursos que eran promovidos por entidades autonómicas o locales, donde sus gobiernos estaban conformados o regidos por miembros de la citada formación Millet i Montull, afirma el tribunal, y pactaron con el tesorero de CDC, Carles Torrent, y sin excluir la participación de otras personas de esta formación que no han podido ser completamente identificadas o de quien su responsabilidad penal ha sido declarada prescrita, que Ferrovial entregaría dinero a CDC a cambio que esta garantizara la adjudicación de un determinado volumen económico de obra pública de forma anual.
En este entramado de pago de comisiones por obra pública, Millet y Montull contribuyeron a su creación en un inicio y posteriormente, junto con Gemma Montull tras el ingreso de esta en el Palau "al desarrollo, perfeccionamiento y mantenimiento del mismo. Para ello, estos pusieron a disposición de los directivos de Ferrovial y miembros de CDC toda la estructura económica del Palau de la Música, para que estos pudieran esconder el pago y cobro, respectivamente, de las comisiones, bajo la forma de patrocinio los primeros y bajo la de convenios de colaboración y pago de facturas para servicios no prestados para el Palau los segundos".
La comisión que Ferrovial y CDC pactaron que pagaría aquella por el ejercicio de aquel impulso por la obtención de obra pública, era del 4% del importe del total de las adjudicaciones obtenidas y esta cantidad se repartiría entre CDC por una parte y Millet y Montull por otra, en un porcentaje de 2,5% para el partido y uno 1,5% para estos. En su tiempo, Fèlix Millet y Jordi Montull se repartían el porcentaje que les correspondía en un 80% para el primero y un 20% para el segundo.
Este acuerdo criminal se mantuvo ininterrumpidamente desde antes del año 1999 hasta el 2009, cesando el mismo a raíz de la entrada y registro de las instalaciones del Palau de la Música acordada judicialmente en el presente procedimiento.
Las comisiones ilícitas pactadas por los acusados Pedro Buenaventura y Juan Elízaga, con Millet, Montull, Daniel Osàcar y, antes que este, Carles Torrent, con destino a CDC, para la adjudicación de obra pública, se hacían llegar a esta formación política de forma enmascarada, sirviéndose para ello de la estructura jurídico-financiera del Palau de la Música que Fèlix Millet y Jordi Montull, con la determinante cooperación de Gemma Montull, ponían para tal efecto a su disposición.
Desde principios de 1999 hasta julio de 2009, el total de comisiones satisfechas por Ferrovial a CDC en las indicadas formas, ascendió, como mínimo, a 6.676.105,58 euros.
¿Qué pedía la Fiscalía?
La Fiscalía pedía para Fèlix Millet 14 años y 9 meses; para Jordi Montull, 10 años y 10 meses de prisión, y para Gemma Montull 2, después de que los tres acusados realizaron el pacto con el fiscal que incluía la confesión y la rebaja de pena a fin de que la exdirectora financiera no entrara en la cárcel.
El extesorero de CDC Daniel Osàcar, el único miembro de este partido sentado en el banquillo de los acusados para las presuntas comisiones ilegales, que negó los hechos, tenía una petición de pena de prisión de 8 años, después de que el fiscal aumentara su solicitud medio año.
Esta mañana se ha notificado la sentencia a todas las partes, 38. Los acusados y sus abogados han escuchado las penas en la sala de vistas número 2 del jurado del Palau de Justícia, una de las mayores salas con capacidad para todas las partes implicadas en el expolio del Palau. A los procesados se les ha entregado en mano de un CD con la sentencia grabada y la decisión judicial en papel, y a los abogados, un CD con la sentencia grabada.
Fèlix Millet, en silla de ruedas, y Jordi Montull, del brazo de su hija, también procesada, se han movido con naturalidad y dificultades, también, por una Audiencia de Barcelona con un refuerzo en las dotaciones de los Mossos de Esquadra.