El rey Juan Carlos I está en los Emirates Árabes Unidos, no ha cumplido nada de lo que prometió el año 1981 después del intento de golpe de Estado. "Juro que ni abdicaré la corona, ni abandonaré España", escribió en un texto que leyó -en otras versiones fue un telex que envió- al teniente general Milans del Bosch, que se había sublevado en València.
El rey emérito siempre podrá argumentar que el compromiso fue en el contexto del 23-F, que nunca ha sido totalmente aclarado, pero la realidad es que la frase ha sido como un destino fatal que se ha cumplido de forma inexorable. La frase no ha dejado de perseguirlo, en forma de sentencia.
Juan Carlos I acabó abdicando el año 2014, a raíz de la polémica por la cacería en Botsuana en plena crisis económica en España y cuando ya empezaban a aparecer escándalos con Corinna Larsen. Tomó la decisión de abdicar el 5 enero, el día del su 76 aniversario, el 31 de marzo lo comunicó al entonces presidente español, Mariano Rajoy, y tres días después al líder socialista, Alfredo Pérez Rubalcaba. Pero lo mantuvieron en secreto y esperaron a anunciarlo al 2 de junio para que pasaran las elecciones europeas.
Seis años más tarde se ha completado el destino del monarca, con la huida que protagonizó según parece el 2 de agosto con la ayuda del Gobierno. La Casa Real hizo público al día siguiente un confuso comunicado en la forma de una carta del rey emérito dirigida a Felipe VI, que obligó a una nota aclaratoria posterior precisando que se mantenía a disposición de la Justicia.
La huida ha coincidido con las investigaciones que está realizando la Justicia suiza sobre el supuesto cobro de comisiones de países árabes, reveladas por la Tribuna de Genève y The Telegraph, que también han hecho que se activara finalmente la Justicia española.
Cuando ya han pasado 11 días de la huida del monarca emérito, ni la Casa Real ni el Gobierno han dado información de donde se encuentra, a pesar de la inquietud que se ha creado en la sociedad.
Juan Carlos I no tendrá plena inmunidad para la Justicia suiza, a diferencia del criterio español. El profesor de derecho de la Universidad de Zurich Frank Meyer ha manifestado en Swissinfo que, aunque el rey emérito sea inviolable en España, "la ley española no tiene ningún efecto directo en Suiza".
"Juan Carlos I se podría beneficiar de una 'inmunidad funcional' cuando era Rey, pero esta inmunidad está ligada a su función de agente público del Estado y no se aplica en lo que respeta a la persona privada", ha añadido.