Pablo Casado, que ha anulado su agenda de este miércoles, ha acudido a La Moncloa con una larga lista de deseos. Hasta 18 cosas ha pedido al presidente en funciones Pedro Sánchez, desde activar la Ley de Seguridad Nacional hasta el requerimiento previo a Quim Torra que exige el artículo 155 de la Constitución para su aplicación. También ha pedido a la Fiscalía que empiece a actuar contra los presidentes de la Generalitat y el Parlament. Ha denunciado que ya se están produciendo "conductas ilegales" en Catalunya. Ha llegado a decir que "el independentismo siempre ha hecho uso de la violencia". Ya se ha acabado su giro a la moderación.

Un Casado que ha asegurado que "parece que la Generalitat se ha declarado en rebeldía" ha pedido al Consejo de Ministros que envíe al president Torra que "un requerimiento para que proceda al cumplimiento de sus obligaciones". Ha asegurado que, de esta manera, el Gobierno podría activar en cualquier momento momento las previsiones constitucionales" y el Estado podría asumir las competencias que considere oportunas". Ha justificado la necesidad de medidas excepcionales para echar a Torra de "la cadena de mando" de los Mossos d'Esquadra. "El Estado tiene todo nuestro apoyo para hacer lo que tenga que hacer", ha defendido.

El dirigente conservador ha puesto otros deberes inmediatos: "Ante los acontecimientos, el gobierno tiene que aplicar ya la Ley de Seguridad Nacional para que Quim Torra no esté en ningún momento en la cadena de mando de Interior". En esta línea, ha insistido en que "la Ley de Seguridad Nacional se creó para momentos como este". Ha defendido que los Mossos están haciendo una buena labor, pero ha justificado que no se entendería que, al frente, haya una autoridad que al mismo tiempo llama a manifestarse contraala sentencia.

Casado también ha encargado trabajo a la Fiscalía, que según él "es el gobierno". En primer lugar, le ha pedido al ministerio público que "actúe de inmediato contra el presidente del Parlament, el presidente de la Generalitat y otros cargos por incitar al desorden público, la desobediencia y estar participando del sabotaje". En segundo lugar, ha exigido que la fiscalía "tiene que actuar ya contra los CDR y el Tsunami Democrático" por los delitos de desórdenes públicos, estragos y atentados contra la autoridad. El dirigente popular ha llegado a decir que "el independentismo siempre ha hecho uso de la violencia" y que "todo el procés ha avanzado dando pasos violentos".

Por otra parte, el presidente del PP ha preguntado al gobierno de Pedro Sánchez que detenga cómo pueda la huelga general convocada para este viernes en Catalunya, con el objetivo de "evitar una nueva jornada de disturbios". La lista ha continuado con promesas una vez llegue a la Moncloa, como la reforma de la ley del indulto, la recuperación del delito de "rebelión impropia", la recuperación de la competencia o el aplicación de la ley de partidos "para que cualquier partido que justifique o aliente actos violentos pueda ser ilegalizado".

"Salgo de esta reunión con la impresión de que la imprevisión ha superado a Pedro Sánchez", ha afirmado Pablo Casado, que ha recordado que "cuenta con todos los mecanismos del Estado de derecho para hacer frente en la escalada de violencia inadmisible". Ha aprovechado para pedirle que rompa todos los pactos municipales con partidos independentistas, como lleva haciendo las últimas semanas. "Sánchez tiene que escoger entre los que lo hicieron presidente del gobierno o los constitucionalistas a los que pide apoyo", ha concluido.