En el día D del Tribunal Supremo, La Moncloa ha centrado sus esfuerzos en un ámbito: el internacional. Porque es fuera de las fronteras españolas, empezando por el Tribunal Europeo de Derechos Humanos y continuando por la nueva euroorden contra Carles Puigdemont, donde más está en juego la misma sentencia. Nada más empezar la jornada, a las siete y cuarto de la mañana, ya ha difundido un vídeo en varios idiomas de los ministros defendiendo que España es una democracia. Después, al mediodía, ha venido la declaración institucional del mismo Pedro Sánchez, que también ha hecho en inglés con un lenguaje más plano y comprensible en el exterior. Y por la tarde ha sido el turno de España Global, la Secretaría de Estado encabezada por Irene Lozano, que ha convocado al cuerpo diplomático acreditado en Madrid.
En una "sesión informativa" en la sede del Ministerio de Exteriores en Madrid, la Secretaría de Estado de la España Global ha convocado al cuerpo diplomático acreditado en el estado español. El motivo era evidente: la "sentencia de la causa especial del Tribunal Supremo". Hasta las Torres Agora de la capital española se han acercado un centenar de representantes diplomáticos, que han sido aleccionados por Irene Lozano sobre la calidad del sistema judicial español después de un proceso tan complejo.
Durante esta sesión informativa, Lozano ha querido rebatir los argumentos de los independentistas, que cuestionan que España sea un estado de derecho. La secretaria de Estado de la España Global ha contestado que, durante el procedimiento judicial, se han garantizado los derechos de todo el mundo, y ha defendido que en el estado español no se persigue a nadie por sus ideas, sino por delitos. Un resumen de lo que ha dicho Pedro Sánchez en su intervención en inglés desde la Moncloa.
Spain is a consolidated democracy. It's one of the most advanced Rules of Law in the world and one of the most free and safe countries.
— Pedro Sánchez (@sanchezcastejon) October 14, 2019
This is the real Spain. We´ve done it together, citizens and institutions. Based on coexistence, respect and the law.#EverybodysLand pic.twitter.com/wmKr9S9Raw
La jornada ha empezado muy temprano. Pocos minutos después de las siete de la mañana, a pocas horas de la sentencia del Tribunal Supremo, el gobierno de Pedro Sánchez ha querido empezar ya la batalla por el relato en el mundo. Es por eso que ha hecho público un vídeo donde la vicepresidenta Carmen Calvo, y los ministros Josep Borrell, Fernando Grande-Marlaska, Isabel Celaá, Nadia Calviño, Teresa Ribera, Luís Planas, José Guirao y Pedro Duque "defienden las fortalezas de la democracia española" en varios idiomas, como el inglés, el francés, alemán o ruso.
Después de la sentencia, el mismo Sánchez ha hecho una declaración institucional en inglés, donde ha subrayado que el procedimiento judicial contra los dirigentes independentistas ha sido transparente y justo, que no se persigue a nadie por sus ideas y que en España "nadie está por encima de la ley". Todo a la espera de que el caso llegue a Estrasburgo y de que Bélgica vuelva a resolver la euroorden contra Carles Puigdemont. En el primer intento fue tumbada.