La consellera d'Acció Exterior del Govern, Meritxell Serret, ha reivindicado este miércoles desde Finlandia el carácter "innovador" del plan piloto catalán de Renta Básica Universal, una iniciativa que el ejecutivo tiene previsto poner en marcha durante el 2023 y donde participarán en torno a 10.000 personas. En un acto celebrado en la agencia de Seguridad Social finlandesa, en Helsinki, Serret ha asegurado que el país nórdico "es un modelo a seguir", ya que son pioneros al realizar un experimento similar entre 2017 y 2019. De hecho, la presentación del plan catalán ha contado con la presencia de la ministra de Servicios Sociales finlandesa, Hanna Sarkkinen, quien ha calificado la iniciativa del Gobierno como "una oportunidad valiosa para aprender".
Turno de Catalunya
Serret ha calificado a Finlandia de referente con respecto a la puesta en marcha de programas de renta básica universal y considera que ahora "es el turno de Catalunya". En este sentido, también ha manifestado la intención del Gobierno "de fortalecer las relaciones con Finlandia y otros países nórdicos", haciendo valer la tarea de la delegación catalana a la región. Al mismo tiempo, la titular de exteriores, ha indicado que tanto Finlandia como Catalunya trabajan para implementar políticas "con el objetivo de mejorar la vida de las personas" y que contribuyen a la construcción de una sociedad "más equitativa e igualitaria". Serret, además, ha subrayado que el plan catalán es el mayor que se ha diseñado en el ámbito europeo, reconociendo así que se convertirá en una iniciativa que tendrá un carácter "muy relevante".
El plan piloto de la Renta Básica Universal, que se aprobó en noviembre de 2021, es una de las iniciativas prioritarias del Govern durante esta legislatura, tal como han dejado claro varias veces otros miembros del ejecutivo. El objetivo del plan es evaluar el impacto que tiene cobrar una prestación en aspectos como el bienestar emocional, físico o el mundo laboral y compararlo con los efectos que genera el sistema actual de prestaciones selectivas. Con todo, el plan prevé que en torno a 5.000 personas distribuidas por toda Catalunya reciban una asignación monetaria durante dos años, que será de 800 euros mensuales por adulto y de 300 euros mensuales por menor de 18 años. Del total, 2.500 personas serán escogidas de manera aleatoria y 2.500 corresponderán a la población de dos municipios. Por otra parte, 5.000 ciudadanos más podrán participar en actuaciones de evaluación, como contestar encuestas. En cualquier caso, la muestra excluirá el 10% de las rentas más elevadas.
Finlandia, pionera de la medida
El primer país en poner en marcha un experimento sobre una renta básica universal fue Finlandia, entre el año 2017 y 2019. Consiguió resultados positivos en el impacto sobre el mercado laboral y el bienestar de sus beneficiarios, siendo una inspiración para iniciativas posteriores. De hecho, el acto de presentación de este miércoles se ha celebrado en la agencia de Seguridad Social a finlandesa -KELA, para|por sus siglas en finés-, el organismo gubernamental que precisamente se encargó de desplegar el proyecto en el país.