La socialista María Chivite ha sido reelegida como presidenta de Navarra este martes, gracias a los votos favorables de los 21 diputados del PSN, Geroa Bai y Contigo Zurekin, y la abstención de Bildu. Asimismo, los 20 diputados de UPN, PP y Vox han votado en contra de la candidata socialista, que afrontará su segundo mandato al frente de la presidencia del gobierno navarro. Los socialistas dirigirán 8 departamentos, mientras que Geroa Bai 4 y Contogo Zurekin, 1.
La votación ha tenido lugar a las 17.20 horas de este martes festivo en el salón de plenos del Legislativo navarro. Cada uno de los representantes de la Cámara ha depositado su voto, después de ser llamados por orden alfabético, con uno 'sí/bayo', 'no/ez' o 'abstenció/abstentzioa' en una urna.
Después de que el lunes en la primera votación Chivite no consiguiera la mayoría absoluta, pasadas 24 horas los parlamentarios de EH Bildu se han abstenido, tal como estaba previsto, para posibilitar la investidura de María Chivite. UPN, PPN y Vox han mantenido su voto en contra a la candidata socialista. De esta manera, Chivite ha sumado 21 apoyos, ha recibido 20 votos en contra y ha tenido 9 abstenciones.
Navarra era una de las comunidades autónomas que quedaban para definir su gobernabilidad después de las elecciones del pasado 28 de mayo. A estas alturas, queda para definir Murcia, donde el PP y Vox están teniendo problemas para llegar a un acuerdo de gobernabilidad a causa de las exigencias de los ultraderechistas.
La trayectoria de Chivite
La trayectoria de Chivite como política empezó hace 20 años como concejala de su localidad nata, Cintruénigo. Desde entonces fue diputada en el Parlamento de Navarra en el 2007, senadora en el 2011 y secretaría general en el 2014.
Desde que en 1996 el socialista Javier Otano dimitiera como presidente de Navarra al conocerse una cuenta a su nombre en Suiza, se han sucedido en la Comunidad foral las presidencias de Miguel Sanz (UPN), Yolanda Barcina (UPN) y Uxue Barkos (Geroa Bai) hasta que María Chivite entrara en el Ejecutivo en el 2019.
Las elecciones generales han marcado las negociaciones
Las elecciones generales han marcado las negociaciones de gobierno y las diferencias entre los socios se han ralentizado hasta el punto que este agosto estuvieron a punto de romper el acuerdo. La presidenta socialista ha pronunciado un discurso breve, de 45 minutos, aunque contaba con un tiempo ilimitado para exponer sus argumentos y su proyecto.
La derecha, con UPN al frente con 15 diputados, ha tildado la votación de "pactos de perdedores" y han criticado los pactos con Bildu, cómo hacen por todo el Estado español.