Este miércoles se ha iniciado la apertura de la primera fosa de la Guerra Civil del Plan de fosas 2017-2018. Se trata de una fosa situada en la localidad de Figuerola d'Orcau, en el Pallars Jussà y que se encuentra junto a la pared del cementerio de la localidad donde se han localizado restas óseas de 17 soldados muertos durante la Guerra Civil.
Los indicios apuntan que fueron enterrados de manera precipitada dado que han aparecido con la vestimenta, las botas puestas y, en algunos casos, con los cinturones de munición.
El conseller de Asuntos Exteriores, Relaciones Institucionales y Transparencia, Raül Romeva, ha destacado la sensibilidad humana y personal que requieren estos trabajos. El plan de fosas ha abierto la esperanza de muchos familiares de muertos y desaparecidos durante la Guerra Civil.
Romeva, que ha estado presente en la apertura de esta primera fosa, ha explicado que este Plan de fosas "es un deber que tienen como país y administración, que tiene que permitir hacer justicia con el pasado para poder construir un futuro con mejores condiciones".
El Plan de fosas 2017-2018, ampliable a dos años más de ejecución, tiene 503 tumbas geolocalizadas en el Alto Pirineo y el Arán, el Campo de Tarragona, la Catalunya Central, Girona, Lleida y Tierras del Ebro, 235 de estas están confirmadas y 268 son probables.
El plan prevé 40 actuaciones para el 2017 entre recogidas óseas en la superficie y excavación arqueológica de fosas y, como en el caso de Figuerola d'Orcau, los datos genéticos extraídos de los restos encontrados se cruzarán con los que salen en el plan de identificación genética que la Conselleria impulsó en septiembre junto con más departamentos como Salud y Justicia.