La apropiación del nombre de Junts per Catalunya es lo que trae más riñas en las negociaciones entre el nuevo partido que quiere crear el president en el exilio Carles Puigdemont y la dirección del PDeCAT. Podría empezar a clarificarse a partir del 25 de julio, fecha marcada para celebrar la primera asamblea constituyente y la dirección del proyecto de Puigdemont, pero se encontrará con un escollo: la negativa para apropiarse de la marca.
En una entrevista en Ràdio 4, el alcalde de Mollerussa y diputado del Parlament, Marc Solsona, afirma que eso dependerá de lo que decida su formación: "Junts per Catalunya sólo es posible con el PDeCAT, tanto la marca, el partido como sus derechos". Solsona, en la línea del presidente del partido David Bonvehí, añade: "No nos apropiamos de nada, sólo decimos lo que es y a partir de aquí hablamos de lo que haga falta".
Critica querer crear un partido desde twitter
Solsona, sin poner nombres propios, ha lamentado que "hay momentos que algunos quieren formar un partido vía twitter y eso no ayuda a crear un clima de confianza en positivo a la hora de negociar". Por todo ello, concluye que el futuro de este espacio no depende de ellos: "No rompemos nada nosotros. Es lógico querer marcharse y crear un partido nuevo pero no quedarte y no dejar operar".
El alcalde de Mollerussa no niega una cierta preocupación de cara a la imagen y la confusión que todo ello puede comportar en unas elecciones: "La gente no sabrá a quién votar, aquí hablamos mucho de unidad y más bien es escasa". Por todo ello, reivindica la prevalencia de los suyos: "El PDeCAT es sujeto nuclear de la política catalana, ya estábamos antes de todo el mundo".
¿Quién tiene la marca?
El diario ARA afirma que "se está tramitando una modificación de los estatutos de la formación política Junts per Catalunya en el registro de partidos". La finalidad es cambiar a los representantes legales que sean favorables a la línea del president Puigdemont. Hay que recordar que JXCat se inscribió el año 2018, con Marta Pascal como secretaria general. En el momento de la inscripción estaba la exconsejera municipal del PDeCAT en el Eixample de Barcelona, Laia Canet Sarri. Así pues, no consta de manera formal la dirección del PDeCAT. En definitiva, tendrá que quedar claro su registro y todas las especificaciones, como su sede social.
Una cosa son los trámites jurídicos y la otra su representación electoral. En las elecciones al Parlament de Catalunya del 21 de diciembre del 2017, Junts per Catalunya era el nombre de una coalición entre el PDeCAT y CDC. Este matiz significa que son los dos partidos los que tienen los derechos electorales, en ningún caso JXCat. Saber címo se resuelve este punto condicionará la representatividad durante la próxima campaña: quién se queda con los espacios de propaganda o la presencia asegurada en los medios públicos.