Hoy hace un año del polémico pleno del 6 y el 7 de septiembre en que el Parlament aprobó las "leyes de desconexión" que dieron amparo al 1-O. El camino no estuvo exento de obstáculos, y el desarrollo del pleno se complicó con un pulso procedimental que obligó a suspender la sesión media docena de veces para reunir a la Mesa del Parlament y la Junta de Portavoces.
Finalmente las leyes del referéndum y de transitoriedad jurídica se aprobaron con 72 votos de JxSí, la CUP y el diputado no adscrito Germà Gordó en una cámara medio vacía. Los diputados de Ciudadanos, el PSC y el PP habían abandonado el hemiciclo en señal de protesta.
La gestión de la entonces presidenta del Parlament, Carme Forcadell, fue clave para el desarrollo del plenario y las aprobaciones de las leyes. Es por eso que, un año después y con la presidenta encarcelada por aquellos hechos, el mundo independentista ha querido agradecer con firmeza la tarea de Forcadell.
Entre los centenares de mensajes de agradecimiento y apoyo a la presidenta destacan el del president de la Generalitat, Quim Torra, y el del Parlament, Roger Torrent.
La secretaria general de ERC, Marta Rovira, la consellera de Salud, Alba Vergés, el exlíder de Podem, Albano Dante Fachin, y el exdiputado de JxSí Lluís Llach también han reivindicado la figura de la presidenta durante el 6 y 7 de septiembre.
Forcadell está ahora en prisión provisional en el centro penitenciario de Mas de Enric, en el Catllar, y se la investiga por los delitos de desobediencia, rebelión y sedición por varias actuaciones en el cargo durante la legislatura anterior. En concreto, ella y cinco miembros más de la Mesa del Parlament están siendo investigados por los delitos de prevaricación y desobediencia por aquel pleno.