Al fondo, el cielo claro, el mar y el Hotel Vela. Y, en medio del Eixample, la Sagrada Familia en su siempre inacabable construcción. En primer plano, dos mujeres se abrazan desde el turó de la Rovira deslumbradas por el espléndido sol que ilumina Barcelona. Quien apoya la cabeza sobre el pecho de la alcaldesa de la capital catalana es la vicepresidenta segunda del Gobierno. Se trata de la edulcorada fotografía que colgó Barcelona En Comú este miércoles en su cuenta de Twitter para dejar constancia, por enésima vez, de la buena sintonía entre Ada Colau y Yolanda Díaz. La líder de Sumar tendrá el apoyo de los comuns en la guerra abierta con Podemos que se alargará durante los próximos meses.

Si en los últimos años los comuns han utilizado el paraguas de Podemos para presentarse con fuerza en las diferentes elecciones que han ido teniendo lugar, eso podría cambiar en un futuro. En España, el espacio que hay a la izquierda del PSOE ha sido liderado desde hace casi una década por Pablo Iglesias. El liderazgo de Ione Belarra, su sustituta al frente de Podemos, no es fuerte. Y Díaz, desde que el partido morado apostó por ella para sustituir a Iglesias en la vicepresidencia española, se ha convertido en la piedra angular de este espacio político. Pero hay un factor clave: Yolanda Díaz no es de Podemos. A pesar de estar afiliada al Partido Comunista de España, hace meses que prepara el nacimiento de un nuevo partido, Sumar.

Los comuns son más yolandistas que podemitas. Así se ha puesto de manifiesto en los últimos meses en las invitaciones de personalidades a actos políticos, y en las conversaciones que se producen en los pasillos del Congreso. En Madrid, a menudo se hace evidente la frontera que marca Yolanda Díaz entre los comuns y los diputados españoles de Podemos. La guerra abierta entre Podemos y Yolanda Díaz empezó en noviembre de 2021, cuando la vicepresidenta invitó a un acto en Valencia a Mónica Oltra, la comuna Ada Colau y la ex de Podemos Mónica García. No fue nadie de la formación morada.

"La marca de Podemos está completamente muerta" opina en ElNacional.cat un diputado del Congreso que tiene planes de futuro con Yolanda Díaz. De la misma manera, los comuns tienen la esperanza de que la vicepresidenta segunda del Gobierno pueda participar en actos de campaña en Catalunya de cara a las elecciones municipales del 28-M. Confían en que Colau pueda beneficiarse de la compañía de Díaz, y también al revés: la alcaldesa de Barcelona, así como la líder de los comuns en el Parlament, Jéssica Albiach, asistirá el 2 de abril al acto de Sumar de Madrid en que se prevé que Díaz haga oficial su decisión de presentarse a las elecciones generales de diciembre.

Los comuns adoptan el discurso de Yolanda Díaz

A cualquier ciudadano le hubiera sido suficiente hacerse un paseo por el patio del Congreso de los Diputados una vez terminada la fracasada moción de censura de Vox y Ramón Tamames para entender cómo los comuns mantienen todavía fidelidad a Podemos pero se miran a Yolanda Díaz con más brillo en los ojos. El entorno de Irene Montero aseguraba que ahora mismo no hay conversaciones entre su partido y la vicepresidenta segunda, y pedía "cerrar un acuerdo" con ella antes de las elecciones del 28-M, reordenar el espacio y decidir si hace falta crear una coalición o presentar listas conjuntas lideradas con las marcas que generen más simpatía en según qué territorio. "Hay que tener más fuerza y certeza", se reclamaba desde el núcleo duro de Podemos.

Mientras tanto, fuentes de los comuns señalaban que "ahora no es hora de hablar de listas". Es decir, que hacían uso del mismo argumentario que Yolanda Díaz. Hay a quien cree que la intención de la vicepresidenta es dejar que Podemos saque malos resultados en las elecciones de mayo y, con el partido morado debilitado, tener más fuerza para negociar una coalición —o una absorción, el tiempo lo dirá— liderada por ella; y llegar a las elecciones de diciembre como sucesora definitiva del liderazgo de Pablo Iglesias.

Con todo este lío, además, quien preside el grupo parlamentario de Unidas Podemos en el Congreso de los Diputados es el comú Jaume Asens. Es por eso, también, que desde los comuns se insiste en que el grupo parlamentario está "muy unido". De la misma manera, los socios de Podemos en el Congreso piden a Podemos paciencia y esperar a tener certezas con Díaz después de las elecciones de mayo. En cambio, mientras Ione Belarra e Irene Montero intentan hacer chantaje a Díaz y se niegan a asistir al acto del 2 de abril si no existe antes un acuerdo con respecto al 28-M, Asens opinaba este miércoles al salir del Congreso que sería "positivo" que Podemos hiciera acto de presencia para "visualizar la deseada unidad de todos los actores" del espacio.

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Ione Belarra e Irene Montero durante el debate de la moción de censura de Ramón Tamames / Foto: EFE

El resto de aliados de Yolanda Díaz

Los comuns catalanes no son los únicos que se sienten atraídos por el liderazgo de Díaz. Pasa lo mismo con los comunes gallegos y, sobre todo, con Izquierda Unida. Además, durante la moción de censura de Ramón Tamames, desde la tribuna del hemiciclo del Congreso se pudieron percibir detalles que traspasan las declaraciones y se sitúan en el universo de las relaciones humanas. La frialdad de los aplausos de Irene Montero e Ione Belarra al discurso de Yolanda Díaz contrastaron con la caricia de la vicepresidenta en la mejilla de Joan Baldoví y el guiño de ojo con Íñigo Errejón.

El diputado de Compromís ha insistido en varias ocasiones que "sumar no tiene que significar amontonar". A pesar de las reivindicaciones de Baldoví de la marca de su partido, se sabe que la formación valenciana podría concurrir en las próximas elecciones generales bajo el paraguas de Sumar. Íñigo Errejón y Mónica García, por su parte, tienen motivos de peso para querer esperar que pase el 28-M: la marca Más Madrid tiene mucha fuerza en la capital española. Ahora bien, el flirteo entre quien fue uno de los fundadores de Podemos y la vicepresidenta española es más que evidente, sobre todo por su participación conjunta en actos de Yolanda Díaz.

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Yolanda Díaz y Pedro Sánchez durante el debate de la moción de censura / Foto: Europa Press

La Moncloa refuerza a Yolanda Díaz

"¿Cuando usted tiene que hablar con la líder del espacio a la izquierda del PSOE, habla con Yolanda Díaz o con Ione Belarra?", le preguntaba una periodista de TVE este jueves a Félix Bolaños en una entrevista. El ministro de la Presidencia respondió que, a pesar de mantener el contacto con todo el ejecutivo, lo hace sobre todo con la impulsora de Sumar. Para La Moncloa, es imprescindible que haya "dos fuerzas progresistas que se entiendan en el gobierno", y así se demostró este martes cuándo Pedro Sánchez le cedió un turno de réplica a Díaz.

El discurso de Díaz se tradujo en la presentación de su proyecto político, y en una defensa encarnizada del gobierno de coalición. De hecho, fuentes de la sala de máquinas del Gobierno consideran que la moción de censura ha servido para "movilizar el voto progresista". El PSOE, al fin y al cabo, necesita que el espacio de su izquierda se mantenga unido y no pase como en Andalucía, donde la presentación en dos listas del mismo espacio se tradujo en un fracaso electoral. Los socialistas ya han escogido, pues, que el tándem electoral de Sánchez en las próximas elecciones tiene que ser con Yolanda Díaz.