Cruda batalla por el voto de izquierdas entre Sumar y Podemos. Las formaciones que encabezan Yolanda Díaz e Irene Montero han llegado este viernes a la clausura de la campaña por las elecciones europeas en medio de una visible disputa para ocupar la hegemonía a la izquierda del PSOE. Un voto que, hoy por hoy, las encuestas auguran que barrerá Sumar, si bien se pronostica que Podemos tendrá voz y se llevará un grosor importante de votos que dará representación en el Parlamento Europeo. Después de la reyerta pública que se vivió el verano pasado en el marco de las elecciones generales, con el veto que impuso a la líder Yolanda Díaz sobre la figura del entonces ministra de Igualdad Irene Montero a las listas de Sumar, ya se esperaba que el enfrentamiento entre las dos familias políticas fuera dura. Y, a pesar de algunos esfuerzos de reconciliación, lo ha sido por momentos. Lo que sorprende, sin embargo, es ver que en la práctica las diferencias no son tan importantes.
Sumar y Podemos han cerrado la campaña con unos discursos prácticamente calcados, con más similitudes que contraposiciones. Las políticas progresistas han estado al epicentro de los mensajes de las dos candidaturas. Sin embargo, por encima de todo, se ha apelado al voto con gritos de alerta por la opción real de que la ultraderecha crezca en el Parlamento Europeo y acabe dictando las prioridades de la Unión durante los últimos cinco años. La guerra en Gaza también ha sido un elemento clave, con mensajes alabando Palestina y condenando el Israel de Benjamin Netanyahu.
Dos izquierdas con las mismas prioridades
Ha sido la cabeza de lista de Sumar, Estrella Galán, la que más ha evidenciado estas prioridades para su candidatura. En el acto final desde Valencia, y en una clara alusión a Irene Montero, ha añadido que "nadie les dará lecciones" de cómo proteger los vulnerables, ni en la defensa de la causa palestina. En este sentido, ha hecho un llamamiento al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, para exigirle que vaya más allá y rompa relaciones diplomáticas con el "genocida" Netanyahu, que ha superado "todos los límites de la crueldad". Yolanda Díaz se ha unido al mensaje para aplaudir el trabajo del gobierno de coalición y disparar contra el líder de la oposición, Alberto Núñez Feijóo, y su Partido Popular, asegurando que la derecha no sacará tan buenos resultados como se espera. "El odio no moviliza a nadie; paraliza, destruye", ha afirmado. Desde Barcelona, el cabeza de lista de los Comuns, Jaume Asens, ha estado más explícito, animando a votar para "frenar la derecha y la ultraderecha". "Llenad las urnas de esperanza", ha clamado.
A la misma hora, desde Madrid, Irene Montero enviaba un mensaje similar, haciendo un llamamiento a parar el "genocidio" en Palestina y situándolo como el trabajo "más urgente" después del 9 de junio. Sin tener miembros de Podemos ya en el Gobierno, la exministra se ha visto con ánimos de llegar a acusar al ejecutivo de coalición de "complicidad" con Israel, y críticas a Josep Borrell y José Manuel Albares. Ella misma también ha advertido de la amenaza que supone la derecha, y ha pedido llenar las urnas de "principios éticos y convicciones profundas", con un mensaje ligeramente más utópico que los rivales de Sumar. "Sonará idealista, sonará ingenuo, pero me niego a resignarme porque si el mundo es injusto, si el mundo es cruel, si las cosas no funcionan, se tienen que cambiar", ha afirmado. Al escenario también ha subido Pablo Iglesias, quien se ha encargado de reivindicar la formación morada y el papel de Irene Montero, después de la deserción provocada para Sumar.