El Tribunal Supremo ha confirmado la condena de un año de inhabilitación especial y multa de 16.800 euros al exconseller de la Generalitat Bernat Solé por un delito de desobendiencia por permitir, cuando era alcalde de Agramunt (Lleida) y diputado del Parlament, la celebración del referéndum del 1-O en su municipio. En una sentencia, los magistrados han desestimado todos los motivos del recurso de casación que presentó Solé contra la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Catalunya (TSJC) que lo condenó. La Sala de lo Penal se reunió el miércoles para abordar el recurso que había presentado Solé a la condena que fue dictada por el TSJC el 20 de septiembre de 2021. Este viernes, el alto tribunal ha hecho pública la confirmación de la inhabilitación que obligará en Solé a dejar el actual cargo de delegado del Govern en Lleida.
El dirigente de Esquerra Republicana es el primer alcalde que és condenado por el referéndum. La sentencia del TSJC salió el 21 de enero de 2021, coincidiendo con el día en que ERC presentó las listas a las elecciones del 14 de febrero al Parlament. El fallo judicial obligó al partido a retirar su nombre como candidato por la circunscripción de Lleida. En su lugar entró la exconsellera de Agricultura, Ganadería, Pesca y Alimentación y actual consellera d'Exteriors, Meritxell Serret, quien de hecho también estaba siendo investigada por desobediencia después del 1 de octubre.
El TSJC utilizó como una de las principales pruebas para condenarlo un reportaje en una revista local que destacaba el papel que había jugado el alcalde para sacar adelante el referéndum. Él siempre ha defendido que su papel durante la jornada del 1-O fue el de estar al lado de la ciudadana en una "fiesta democrática" y se reafirma en que eso nunca tendría que ser considerado delito. Durante el juicio, en qué respondió todas las preguntas del fiscal y el abogado, defendió que su actuación durante aquella votación fue "la que corresponde a cualquier alcalde", y que sólo intervino para preservar el orden público y la integridad de los equipamientos. Además, explicó que por este motivo "en ningún momento" pidió que se escondieran las urnas.
El relato de los jueces
De acuerdo con la sentencia del Supremo, el delito de desobediencia "se consumó desde el momento" en qué Solé, como autoridad -era alcalde de Agramunt y diputado en el Parlament por ERC-, "se negó abiertamente" a cumplir el mandato del Constitucional. Y aunque su defensa diga que no incumplió esta providencia, la sentencia apunta que es "incuestionable" que esta resolución "recogía una decisión y cerraba una orden dirigida a autoridades tan concretas como eran los alcaldes de todos los municipios catalanes". Solé, precisa la Sala, "exteriorizó" mediante actuaciones "concretas" su negativa a cumplir esta orden, como declaró probado el tribunal autonómico catalán, y todo eso -añade el Supremo- "no queda difuminado" por la motivación que le llevó a hacerlo pues, "cualquiera que fuera esta, de ninguna manera excluye su conciencia y voluntad de hacer lo que hacía", suficiente para ser condenado por desobediencia, según el tribunal.
El presidente de ERC, Oriol Junqueras, ha mostrado su apoyo a Bernat Solé a través de un mensaje en Twitter y subrayando que seguirán "con las convicciones firmes". El mensaje es una respuesta a uno de Solé donde ha criticado que, "una vez más, la prensa se ha avanzado al Supremo y me ha comunicado la confirmación de 1 año de inhabilitación".
Por su parte, Solé ha anunciado que volverá a la docencia después de la sentencia de un tribunal "sumergido en la arbitrariedad". "Nada de lo que hice y por lo que se me acusa es diferente de lo que hicieron la mayoría de los alcaldes de Catalunya", ha señalado. En uno de los últimos actos como delegado del Govern en Lleida, ha comparecido para valorar su inhabilitación por parte del Tribunal Supremo. Ha apelado a la negociación y al diálogo para superar el conflicto político. "Que nadie tenga la tentación de juzgar mi inhabilitación como un fracaso de la mesa de diálogo", ha dicho. Finalmente, ha agradecido las muestras de apoyo recibidas y haber podido servir a los ciudadanos como alcalde de Agramunt, diputado en el Parlament, conseller de Exteriors y delegado del Govern en Lleida.