"Nunca he visto una reacción tanto despropocionada por un audio". Tamara Carrasco se ha sentado hoy en el banquillo de los acusados por su implicación con los CDR. El juicio a Carrasco ha empezado hoy y hoy mismo ha quedado visto por sentencia. Acusada de incitación de desórdenes públicos después de estar cerrada durante 14 meses por las acusaciones de terrorismo de la Guardia Civil. La policía encontró un mapa en casa y un mensaje de voz de whatsapp donde explicaba las directrices para los CDR que venían de una asamblea donde había participado. Hoy ha declarado que nunca dio ninguna directriz, sino que transmitió lo que se decidió en una reunión.
Tamara Carrasco ha hecho una declaración corta y ordenada. Admitiendo que formaba parte de un CDR y explicando exactamente el que son: Comités de Defensa del Refèndum del 1-O. Donde se ha destapado ha estado en el turno final de palabra donde ha cargado duramente contra los poderes del estado. "Tengo la oportunidad de explicar la verdad, mi verdad. He partido una operación de estado, con un relato de violencia que no ha existido nunca", ha dicho Carrasco.
En un discurso contundente y que ha leído ha denunciado que ha sido víctima de un asedio público. Toda mi vida se hizo pública y se promovió mi linchamiento público. Se me asedió y se me ha amenazado". Y sobre este extremo ha anunciado acciones legales. Tamara Carrasco fue detenida acusada de terrorismo y ha acabado juzgada por incitar desórdenes públicos, ni tan sólo por provocarlos: "Mi sufrimiento para nada". Carrasco ha tenido palabras también para Adrià Carrasco, el otro acusado en su causa: "Tengo un compañero exiliado a 1.000 kilómetros porque es catalán, antifascista e independentista".
Y ha sentenciado que ha pagado un precio altísimo para manifestarse y defender sus principios: "Esto no se justicia se escarmiento".
La investigación de la policía española
También han declarado hoy dos de los jefes de la investigación que han admitido que las cosas "fueron evolucionando a otra cosa que desembocó en la operación Judas". Uno de ellos ha hecho equilibrios para no tirar por el suelo la causa que hay en la Audiencia Nacional contra los CDR también de la Operación Judas: "Los CDR tienen un tamaño diverso y tienen gente de toda condición. El problema es que una parte de ellos, más que una reivindicación sociopolítica se han orientado en acciones tipos sabotaje y violencia. No quiere decir que todos los CDR tengan esta vena violenta pero sueño grupos muy heterogéneos. Te puedes encontrar de todo: gente activa social y políticamente y gente violenta".
También ha insistido en que el audio "era público" y que corría libremente por la red. Ha apuntado que podría haber sido enviado por un "confidente" pero que no lo sabía a ciencia cierta. También que pudieron determinar que su autora era Tamara Carrasco porque lo compararon con un vídeo alojado en Youtube donde Carrasco leía un manifiesto y que un informe forense preliminar así lo determinó.
Un segundo agente, el secretario del atestado, ha añadido que el audio lo consiguieron de un medio de comunicación que lo había colgado. Eso sí, cuando el abogado de Tamara Carrasco, Benet Salellas, le ha preguntado si hizo constar al atestado cuál era el medio y cuando lo localizaron ha reconocido que no lo hizo constar.
Tanto la Fiscalía como la Guardia Civil han asegurado que las pruebas apuntan que el activista tenía un papel "preponderante" en la organización de actos de sabotaje como respuesta a la detención de Carles Puigdemont.
Aunque la Fiscalía ha reducido la acusación a la incitación del corte de cinco carreteras porque el resto de acciones no se materializaron, uno de los agentes que han declarado ha asegurado que el audio "era el guion de lo posteriormente pasó". La Fiscalía también ha asegurado durante el juicio que el organismo "no tiene nada en contra de los CDR ni de las ideas que defienden". "No acusamos por ideas políticas sino por unos hechos que intentamos demostrar", ha añadido.