El Tribunal Constitucional ha desestimado las medidas cautelares que solicitó el president Quim Torra para suspender la sentencia de inhabilitación que le impuso el Tribunal Supremo mientras se decide sobre su recurso. Sin embargo, la decisión no ha sido unánime y se ha aprobado con el voto discrepante de uno de los magistrados que se ha pronunciado contra el hecho de que el TC en el caso de Torra no haya aplicado su propia jurisprudencia, que considera que en estos casos denegar la suspensión de la pena va en contra de la finalidad del amparo solicitado.
Esta toma de posición alimenta los argumentos de la defensa de Torra, que encabeza el abogado Gonzalo Boye, que afirma que el voto particular le da la razón porque "sin medidas cautelares se deja sin efecto el recurso presentado". En una nota de prensa de la oficina del president se asegura de que "esta decisión abre la puerta del Tribunal Europeo de los Derechos Humanos en relación con la inhabilitación del president en su defensa de la libertad de expresión.
"Se tendría que haber otorgado"
El voto particular ha sido del magistrado Juan Antonio Xiol Ríos que ha mostrado su discrepancia con la opinión expresada por la mayoría del TC y asegura que "de acuerdo con la jurisprudencia constitucional, se habría tenido que otorgar la medida solicitada".
El magistrado considera que aunque se había puesto ya en marcha la ejecución de la pena, era posible acordar la suspensión en relación a los efectos no agotados de esta.
En el texto de su voto particular, Xiol critica los argumentos en que se sustenta la opinión mayoritaria del TC para decidir que no se tiene que aplicar a Torra la jurisprudencia del propio tribunal en otros casos citados de inhabilitación de cargos por desobediencia. Esta jurisprudencia se basa en que la denegación de la suspensión comporta una pérdida, cuando menos parcial, de la finalidad del amparo.
Esta era la respuesta del TC a la demanda de amparo presentada por la defensa del presidente el pasado 29 de septiembre después de que el Tribunal Supremo desestimó el recurso contra la sentencia de inhabilitación.
El president ha mostrado la satisfacción ante este voto particular que considera que "valida los argumentos presentados" por sus abogados.
En opinión de Torra, la decisión del TC de desestimar las medidas cautelares "es un ejemplo más de la aplicación de un derecho penal del enemigo. Europa no puede permitir que los tribunales de un estado miembro discriminen a los ciudadanos en función de su ideología o de la pertenencia a una minoría nacional".
Desde la oficina del expresident se ha asegurado de que la decisión no ha causado ninguna sorpresa. "Una vez más hay que hacer notar que no se aplica la justicia a los independentistas catalanes y que se nos vulnera sistemáticamente el derecho de defensa y de protección legal", se reprocha.