La tensión entre los dos principales partidos políticos españoles se ha trasladado este sábado a los salones del Palacio Real de Madrid. Después del recibimiento de Felipe VI, su esposa y su hija a los 1.300 invitados para celebrar el 12-O, se han producido las habituales conversaciones informales entre periodistas y políticos. Alberto Núñez Feijóo ha atacado a Pedro Sánchez asegurando que "no tendría que estar en esta fiesta" después del escándalo de José Luis Ábalos, ahora que la Guardia Civil sitúa a quien fue hombre de confianza del presidente del Gobierno en el epicentro de la trama Koldo. El líder socialista, por su parte, ha defendido su actuación ante este caso de corrupción, y ha acusado a Feijóo y Abascal de ser unos "Torquemadas" por estar pidiendo constantemente su dimisión.
Por una parte, Feijóo ha opinado que Sánchez tendría que ofrecer una rueda de prensa sin límite de preguntas. Y, por otra, se ha zafado cuando se le ha preguntado por qué su partido no cita al presidente del Gobierno a declarar en la comisión de investigación del caso Koldo que los populares —con su mayoría absoluta— controlan en el Senado. Contradictoriamente, ha defendido que no hay "ninguna prisa" para hacer este movimiento. Y, además, ha descartado presentar al menos ahora una moción de censura. Sea como sea, ha opinado que en las tres décadas que hace que se dedica a la política no ha visto nada similar al caso Koldo. "Eso no hay quien lo pare", ha añadido, porque "nunca una trama de corrupción había estado tan cerca de la Moncloa". De hecho, el líder del PP ha decidido convocar para este domingo al comité de dirección del partido para valorar la gravedad del caso, ahora que la UCO ya señala a Ábalos directamente.
Sánchez, por su parte, ha enmarcado en la normalidad la presión que ejercen PP y Vox hacia su figura. "La noticia sería que no pidieran mi dimisión", ha aseverado. De todos modos, ha defendido la forma como ha afrontado el caso Koldo. "Por desgracia, siempre surgen casos de corrupción, pero la diferencia es siempre la manera como se responde", ha manifestado. El presidente español ha sacado pecho de haber actuado con "transparencia y rapidez", aunque este viernes él mismo ya se contradijo con el relato que había mantenido hasta ahora en el asunto Delcy Rodríguez. Como hizo en la rueda de prensa de este viernes en el Vaticano, el jefe del ejecutivo español ha recordado que su partido expulsó rápidamente a Ábalos de la formación y que también se le reclamó el acta de diputado a quien había sido años atrás su hombre de confianza.
Una renovación profunda en el PSOE
Por otra parte, Sánchez ha reconocido que está confeccionando una renovación en profundidad del PSOE. Habrá "nuevas personas y nuevos discursos" a partir del congreso que el partido celebrará en Sevilla el último fin de semana del mes de noviembre. La intención del presidente del Gobierno es hacer una restauración de su partido que le permita agotar la actual legislatura y permanecer en la Moncloa un mandato más. "Será importante para plantearnos un horizonte dentro de ocho años", ha explicado. Y eso comportará "hacer propuestas que retroalimentan el discurso y la acción del gobierno". Ha dado por hecha la sustitución en el ejecutivo de la vicepresidenta tercera, Teresa Ribera, cuando pase a ser comisaria en Europa, y no se ha querido mojar sobre si habrá todavía más cambios dentro del Consejo de Ministros.
Sobre el recorrido de la legislatura y las dificultades que atraviesa su ejecutivo para sacar adelante medidas en el Congreso de los Diputados, Sánchez ha asegurado que, de momento, ha ganado "todas las batallas políticas grandes" que se han celebrado desde el pasado 23-J. Obviando los presupuestos, ha puesto sobre la mesa la ley de amnistía y la renovación del Consejo General del Poder Judicial; y ha celebrado la buena situación económica que atraviesa España. A pesar de todo, y preguntado expresamente por Carles Puigdemont, ha admitido que "la aritmética parlamentaria es la que es". Ha vuelto a reconocer que su ejecutivo no presentará los presupuestos hasta que Junts per Catalunya y Esquerra Republicana no celebren sus respectivos congresos en octubre y en noviembre.
Illa enmarca su presencia en el 12-O en la normalidad: "Catalunya viene a mejorar España"
Por último, el presidente español ha celebrado que su homólogo catalán, Salvador Illa, haya hecho acto de presencia este sábado en el desfile militar del 12 de octubre. Hacía 14 años que un presidente de la Generalitat no visitaba Madrid en la fiesta nacional de los españoles. "Lo pongo en valor", ha señalado Sánchez. Para él, el gesto del jefe del ejecutivo catalán se enmarca en una "España plural y diversa" que pone de manifiesto que "Catalunya ha vuelto".
En otra conversación informal con periodistas, ha sido el mismo president de la Generalitat quien ha enmarcado en la absoluta normalidad su presencia este sábado en el desfile militar del 12-O en Madrid. Illa ha insistido en que "Catalunya viene a mejorar España" desde que el PSC ha vuelto a gobernar. El socialista catalán ha defendido el "respeto institucional" en una "España plural y diversa" cuando ha sido preguntado por los medios de comunicación sobre su paso en este 12 de octubre por la capital española.
Después de haber hablado con presidentes autonómicos como el andaluz Juanma Moreno sobre la financiación singular para Catalunya, Salvador Illa se ha negado a dar detalles sobre sus "conversaciones privadas". "No vengo en un día como hoy a Madrid a hablar de ciertas cosas", ha manifestado, aparte de añadir, sin embargo, que de momento no ha visto "a nadie defender el actual sistema de financiación". Ha añadido también que el modelo pactado entre socialistas y republicanos a cambio de su investidura "no es insolidario".
La presidenta de la AVT se encara a Sánchez por la convalidación de penas a etarras
Para acabar de añadir más tensión en el Palacio Real, la presidenta de la Asociación de Víctimas del Terrorismo, Maite Araluce, se ha encarado a Pedro Sánchez para recriminarle la reforma legal que permitirá a presos de ETA convalidar sus penas en Francia y salir de este modo antes de prisión. "Es lamentable", le ha espetado. El líder socialista no ha reaccionado al ataque de Araluce.