"Los datos son pésimos", ha dicho la portavoz del Govern, Patrícia Plaja, justo antes de anunciar las medidas que ha establecido la Comisión Delegada en materia de Covid-19, presidida por Pere Aragonès. El Procicat ultima los preparativos de las medidas en una reunión que todavía estaba en marcha cuando han comparecido Plaja y los consellers de Salut, Josep Maria Argimon, y de Interior, Joan Ignasi Elena.
Medidas que pretenden limitar la movilidad y los contactos y que se centran en limitar el final de todas las actividades a las 00.30 horas de la noche. Actividades de todo tipo. Tanto los servicios a domicilio como los actos culturales y sociales. Con respecto a los actos culturales, se tendrá que hacer todo con el público sentado. La medida afecta directamente a los festivales de verano tal como se habían estado haciendo hasta ahora, como en el caso del Canet Rock o el Cruïlla.
Se pide también a los ayuntamientos que desde las 00.30 h hasta las 6 h se restrinja el acceso a todo tipo de espacios públicos como parques o playas en los que se puedan hacer encuentros.
Los encuentros tendrán un máximo de 10 personas, si no son de nuestra burbuja familiar. El Procicat ha determinado un aforo del 70% para bodas, entierros o actos religiosos dentro de las iglesias. En cuanto a los convites en los restaurantes, las tablas deberán ser de seis comensales en el interior y de diez en el exterior.
Además, no se podrá comer ni beber en la vía pública. Y con respecto a los aforos, se establecen 2,5 metros cuadrados por persona en los espacios. Por lo tanto, tanto las salas y espacios cerrados como los espacios abiertos tendrán que recalcular el número de gente que pueden acoger.
Buscar el equilibrio
El conseller de Interior ha remarcado que las medidas "garantizan el equilibrio entre la actividad económica, social y la salud emocional". Joan Ignasi Elena ha pedido un esfuerzo más: "Hemos hecho un camino largo durante este año y medio, un camino extraordinario en el cual ha habido un ejercicio de contención y responsabilidad de la ciudadanía y los servicios públicos magnífico, pero es necesario hacer un esfuerzo más".
El conseller de Salut, Josep Maria Argimon, ha admitido que "pensaba que habría un repunte, pero nunca esta explosión de casos". Y ha añadido que "estaremos semanas con tasas de incidencia elevadas". De cada 100 personas positivas, un 1% acaba en el hospital. Actualmente hay 1.091 personas hospitalizadas, de las cuales 209 están en la UCI.
Sobre la vacunación, el conseller también ha advertido que el número de dosis que llegarán a partir de mañana será menor que hasta ahora. Hasta hoy llegaban 700.000 vacunas por semana. Esta próxima semana se pondrán 500.000 y se llegará a los 8 millones de dosis administradas.
Según Argimon, ha habido una "explosión de casos en muy pocos días". Por eso, tanto la portavoz como los dos consellers han insistido en decir que "es necesario reducir la interacción social".
Estudiando el toque de queda
De momento se ha descartado el toque de queda. La situación no es como la de hace un año cuando se aplicó, ha explicado Argimon. Con todo, el president Pere Aragonès ha pedido un informe detallado por "si llegado el momento, se tuviera que aplicar un nuevo toque de queda", ha dicho Patricia Plaja.