El president, Quim Torra, ha aprovechado su intervención este miércoles en el teatro Kursaal de San Sebastián para llamar a Euskadi a poner en marcha con Catalunya un "frente democrático de defensa de las libertades, incluido el derecho a decidir y el derecho a la autodeterminación". "Marchemos juntos vascos y catalanes. Juntos somos más fuertes y más libres", ha advertido.
"El derecho a la autodeterminación no es negociable, os pertenece a vosotros que aspiráis a conseguir la libertad de vuestra nación. Y está en el camino de la recuperación de la soberanía que Catalunya y el País Vasco pueden avanzar juntos y vencer el autoritarismo del Estado español", ha proclamado.
Incluso ha apuntado la posibilidad de ir juntos a las elecciones europeas para hacer sentir "el clamor de soberanía y democracia" en el Parlamento Europeo junto con valencianos, gallegos, mallorquines... "¿Nos lo planteamos?", ha interrogado.
El president ha pronunciado la conferencia Catalunya: soberanía, democracia y libertad, invitado por la plataforma cívica vasca Gure Esku Dago, que nació en el 2003 con el objetivo de activar el proceso político vasco y que ha impulsado las consultas sobre el derecho a decidir que se están celebrando en Euskadi.
Precisamente, ha mostrado su orgullo por el pueblo vasco que "quiere decidir pacíficamente y democráticamente su futuro político" y ha descrito las consultas que se están haciendo en Euskadi como una gran noticia que muestra cómo la gente se organiza alrededor de las urnas. "Cada mano que introduce un voto en una urna es una herramienta de construcción social. Las urnas son las armas de construcción masiva que tenemos los pueblos", ha remachado.
Referéndums en toda España
De hecho, durante la conferencia no sólo ha dirigido su discurso a Euskadi, sino al conjunto del pueblo español al cual ha emplazado a "empoderarse y ser consciente de la soberanía que tiene". "El pueblo español espero que muy pronto invada los pueblos de los referéndums que tiene que hacer. Monarquía o república: este es el referéndum que España tiene que hacer", ha proclamado.
Seguían el acto desde las primeras filas los responsables de Gure Esku Dago y dirigentes abertzales como Arnaldo Otegi. También algunos dirigentes del PNV como Joseba Egibar. Precisamente, una de las afirmaciones que ha suscitado más aplausos de los presentes ha sido que no apoyará los presupuestos de Pedro Sánchez.
Gritos de "libertad"
Al tomar la palabra, el president ha pronunciado unas palabras en euskera, que han sido recibidas con un largo aplauso ante el cual se ha declarado emocionado por el apoyo de un "pueblo hermano". La ovación más contundente, sin embargo, se ha producido cuando ha evocado a los políticos y líderes sociales independentistas exiliados y presos y ha pedido un aplauso para ellos, una petición ante la cual los presentes han respondido de pie y con gritos de "Libertad".
Igualmente ha recibido una especial acogida del público la proclama de Torra que no aceptará sentencias que no sean la libre absolución de esta gran causa contra el independentismo. "Se trata de ser fieles a nuestra conciencia de personas libres. Su voluntad de venganza será la semilla de nuestra libertad y la defenderemos hasta las últimas consecuencias", ha garantizado.
No pasarán
Torra también ha querido salir al paso de las voces que hablan de división en la sociedad catalana. Se ha mostrado "orgulloso" de la respuesta del pueblo catalán frente a presiones, represión y profecías de desastres, "un pueblo plural y libre". "No hay problemas de convivencia en Catalunya, después de lo que hemos pasado somos más fuertes que nunca. Nunca la cohesión social se juega por un debate político, nunca en pueblos unidos", ha remachado.
"No permitiremos que el fascismo se instale en las calles. No pasarán", ha concluido recogiendo las palabras por las cuales está imputado Jordi Cuixart.
El president había empezado su intervención denunciando la involución democrática en España, que ha descrito más bien como una "máscara que ha caído". "Empezamos a pensar que no es una involución sino un franquismo latente que se ha desacomplejado. La monarquía vive la crisis más profunda desde que fue designado sucesor Juan Carlos", ha denunciado además de acusar a los poderes del Estado de taparse las vergüenzas los unos a los otros al igual que lo hacen los principales partidos: "Hoy por ti, mañana por mí".