El president, Quim Torra, ha convocado una reunión extraordinaria del Govern después de que la JEC ha acordado su inhabilitación, y al acabar ha pronunciado una declaración institucional en que ha anunciado que había pedido al presidente del Parlament, Roger Torrent, la convocatoria "urgente y extraordinaria" para mañana, sábado, del pleno de la Cámara. "És necesario que el pleno de la Cámara se pronuncie claramente para rechazar esta resolución de la Junta Electoral que vulnera la ley. Lo he dicho muchas veces y lo vuelvo a repetir: tan sólo me puede inhabilitar el Parlament", ha subrayado.
"Mientras el Parlament de Catalunya no diga lo contrario, seguiré siendo diputado y president de Catalunya y ejerciendo las funciones de mi cargo. Soy diputado del Parlament y president de Catalunya", ha asegurado.
Tan pronto como ha acabado la comparecencia, que se ha hecho en la sala Torres Garcia, el presidente del Parlament ha anunciado que había hablado con todos los presidentes de los grupos parlamentarios para anunciarles la convocatoria para mañana a las 17 horas del pleno de la Cámara.
El president de la Generalitat ha denunciado que "es la segunda vez que se intenta destituir a un presidente de Catalunya desde un despacho de Madrid" en lo que ha descrito como uno "155 sin ni siquiera pasar por el Senado". "Una vez más se quiere alterar la voluntad política de los catalanes por vías irregulares absolutamente antidemocráticas", ha denunciado.
Ante esta situación, ha llamado a reforzar las instituciones y ha advertido que sólo la Cámara que representa a los catalanes puede decidir quién es el president y quien dejar de serlo.
"Ya les anuncio que presentaré todos los recursos posibles contra esta decisión autoritaria y completamente irregular", ha asegurado para destacar acto seguido la división que se ha producido a la JEC para adoptar esta decisión.
El president se ha referido también durante su comparecencia a la inhabilitación del del vicepresident Oriol Junqueras como a eurodiputado, que también ha acordado hoy la JEC y ha tildado esta decisión de "ataque gravísimo".
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