Las informaciones relacionadas con la polémica de los trenes que no cabían en los túneles en Cantabria por un error en la anchura de los vagones no se detienen. El Ministerio de Transportes anunció este lunes la destitución de dos cargos de la empresa implicados en este escándalo. Por una parte, Adif despidió al titular de la dirección de Inspección y Tecnología como medida preventiva, mientras que Renfe hizo cesar de su responsabilidad en Gestión de Materia, el que era el gerente del Área de Gestión de Material de Renfe Viatgers en el momento en qué se preparó el proyecto de estos trenes. Ahora, pero parece que estos despidos se tratan de salidas de empleados públicos que ya estaban previstas por otros motivos, según informa este miércoles ABC. Fuentes internas de ambas empresas públicas aseguran que "se les ha utilizado como cabezas de turco para no asumir ninguna responsabilidad política".
Señalar culpables
Renfe decidió señalar como uno de los culpables de los errores en la fase de diseño de los trenes. Por una parte, el gerente del Área de Gestión de Material de Renfe Viatgers, un trabajador de 67 años, y que según han apuntado fuentes internas en el citado diario, su jubilación ya estaba prevista para este año. Por esta razón es que las mismas fuentes califiquen el cese como "ficticio" para quedar bien ante la opinión pública y los gobiernos autonómicos implicados en la chapuza ferroviaria, que desde el primer momento han exigido al Ministerio que asuma responsabilidades. La otra presunta señalada es el jefe de Inspección y Tecnología de Vía de Adif, todo y que, las mismas fuentes apuntan que ya estaba previsto que abandonara este cargo por otros motivos.
Aunque se han destituido en estos dos trabajadores y el ridículo que supone esta pifia, desde el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana ha aclarado que el error en los nuevos trenes de cercanías destinados principalmente a Cantabria y Asturias, no ha supuesto "ningún gasto público" y que la única cosa que implica "es un rediseño que supone un retraso en la fabricación". A través de un comunicado, el Ministerio destacó que "no se ha producido ningún gasto por la fabricación de trenes", señalando que se han puesto en marcha los mecanismos necesarios para corregir el error, que "no son inmediatos, ya que es una situación singular que requiere un diseño en medida para garantizar que los trenes puedan circular por las líneas de ancho métrico, aunque los túneles tengan unas dimensiones más reducidas, pero sin perder prestaciones."
Los trenes llegarán a Cantabria y Asturias en 2026
El Ministerio, del cual es titular Raquel Sánchez, prevé que los trenes de cercanías para Cantabria y Asturias lleguen en 2026, con un retraso de dos años, y ha pedido a la empresa adjudicataria CAF un calendario por "saber si se pueden ajustar los plazos". Un anuncio que hizo este miércoles en Santander al secretario general de Infraestructura, Xavier Flores, a los consejeros responsables en materia ferroviaria y de movilidad de Cantabria y Asturias, a los que explicó que el retraso se debe a "una discusión técnica y compleja que podría haber sido más diligente" para adaptar los trenes al ancho métrico de estas regiones.