Pedro Sánchez ha puesto el freno de mano y ha cambiado de estrategia con Junts per Catalunya. En un día y medio, y después de la reunión en Suiza, ha hecho un repóquer de gestos con los independentistas de Míriam Nogueras: retirar el techo de déficit del orden del día del jueves en el Congreso, aceptar una negociación sobre este tema, enviar una carta a Europa para reclamar la oficialidad del catalán, reactivar las comisiones de investigación sobre la Operación Catalunya y el 17-A, y comprometerse a desclasificar los informes del CNI sobre los atentados de 2017. Y ha, también, accedido a debatir en la cámara baja sobre otorgar al Centro Nacional de Inteligencia de una mayor transparencia. El trato prioritario a este partido independentista, sin embargo, genera envidias en los socios parlamentarios habituales de los socialistas, y amenazan ahora con encarecer sus apoyos en el hemiciclo madrileño.

Esquerra Republicana y Podemos han empezado a refunfuñar. Fuentes de ERC en el Congreso de los Diputados manifiestan que el PSOE tendrá que negociar ahora con todos los grupos parlamentarios su apoyo al techo de déficit. Es una forma de anunciar que encarecerán su 'sí' a la senda, porque ya votaron a favor el pasado mes de julio, cuando la cámara baja lo tumbó con el 'no' de Junts. Y ahora el Gobierno había presentado un techo exactamente igual, pero ha hecho marcha atrás cuando los diputados de Míriam Nogueras lo iban a tumbar nuevamente. "Hay que negociar desde cero", apuntan desde las filas republicanas en Madrid. Explican que en la negociación pedirán cosas que están pendientes con el PSOE y no descartan poner nuevas exigencias sobre la mesa.

De hecho, este martes, Gabriel Rufián disparó contra el "error" cometido por el PSOE cuando decidió hacer marcha atrás con la senda de déficit; un gesto que implica ceder ante el "chantaje" de Junts per Catalunya. "Que entienda el PSOE que si la abre para unos, la abre para todos, empezamos de cero", sostenía el líder de ERC en el Congreso en referencia a las negociaciones con los socialistas para aprobar un paso imprescindible para tener presupuestos generales del Estado en 2025. "Seguramente no tendremos los mismos intereses que la derecha catalana, pero lo intentaremos", sentenció.

Ante la enfadada de ERC, Míriam Nogueras replicó que le gustaría tenerlos al lado y "no hacer esta lucha solos". Y también disparó contra el PSC. En una entrevista en la cadena SER, recordó que hace una década, tanto los socialistas como los republicanos votaron en el Parlament a favor de una resolución que instaba al Gobierno a reservar para las comunidades autónomas un tercio de los objetivos de déficit. Es precisamente lo que ahora pide Junts y que el Gobierno dice, de momento, que es "inasumible". Además, en otra entrevista en RNE, Nogueras hurgó en la herida de los diputados de Gabriel Rufián asegurando que en la última legislatura fueron constantemente "engañados" por el PSOE. "Y ahora disparan contra Junts", lamentó; aparte de reivindicar que su partido sí que "mantiene la posición".

Podemos también encarece sus apoyos

También Podemos ha dado un grito al cielo. Este miércoles, en declaraciones en los pasillos del Congreso, Ione Belarra advertía que su formación reconsiderará su apoyo al techo de gasto si en la negociación con Junts per Catalunya se incluyen "concesiones en clave conservadora". Y avisó de que en la medida en que sus votos sean imprescindibles, "obligarán" a Pedro Sánchez a "girar a la izquierda". En conversaciones informales con los periodistas de la cámara baja, la capitanía de Podemos admite que están hartos del papel protagonista de Junts. Reconocen que el grupo parlamentario de Míriam Nogueras ha conseguido acaparar todos los focos y situarse en una situación privilegiada en las negociaciones con el PSOE.

El PNV teme "estrecheces" en los presupuestos si se aplaza su aprobación

También este martes el PNV valoró la decisión del Gobierno de guardar en el cajón el techo de gasto. En opinión de Aitor Esteban, guardarla durante demasiado tiempo puede provocar "estrecheces" en los presupuestos generales de 2025. No obstante, el portavoz del PNV en el Congreso ya dejó claro que su partido tiene voluntad de aprobar este trámite. Hay que tener siempre en cuenta que los jeltzales gobiernan en Euskadi de la mano de los socialistas. En opinión de Esteban, el techo propuesto por el Ministerio de María Jesús Montero "beneficiaría a todas las instituciones del Estado".

Bildu, por su parte, y como ya es habitual en esta formación, reiteró el martes su voluntad de aprobar el techo de déficit del Gobierno. El argumento que expuso Arnaldo Otegi, coordinador general de los abertzales, es que la alternativa a un gobierno de PSOE y Sumar es una Moncloa ocupada por el PP y por Vox.

 

Los presupuestos, pendientes de los congresos de ERC y Junts

Sea como fuere, Pedro Sánchez ya dejó claro este miércoles por la noche que los presupuestos generales del Estado seguirán un calendario adaptado a los congresos de octubre y noviembre que celebrarán Junts per Catalunya y Esquerra Republicana, respectivamente. “No hacemos políticas sobre el vacío; habrá que esperar a los congresos de los socios parlamentarios”, respondió el presidente del Gobierno en rueda de prensa a las preguntas de los periodistas sobre esta cuestión. “Paso a paso; primero vayamos al techo de déficit”, añadió el líder socialista, además de asegurar que tiene entre ceja y ceja hacer los "deberes" y aprobar unas cuentas para 2025. Así pues, el PSOE esperará a ver como respira el independentismo a partir del mes de noviembre para encarar el resto de la legislatura.

A pesar de todo, durante su discurso en esta comparecencia ante los medios de comunicación, disparó contra el PP, que “mira hacia otro lado y vota en contra de poner 12.000 millones de euros para las comunidades autónomas”. Dicho esto, aseveró que el “Plan A” del ejecutivo que preside es aprobar las cuentas.