El Tribunal de Cuentas ha abierto procedimiento contra el exidirector de la Oficina Antifrau de Catalunya (OAC), Daniel de Alfonso, por cobrar dos retribuciones indebidas durante su época al frente de la oficina. El Tribunal de Cuentas ha iniciado un procedimiento de sanción y recobro por el doble complemento salaría irregular, que podría haber llegado a los 300.000 euros, según ha podido saber el Crónica Global. El propio tribunal ha informado de la apertura de procedimiento contra el exdirector por "retribuciones indebidas" señaladas por la Sindicatura de Cuentas. La Sindicatura envió dos informes al Tribunal de Cuentas hacia el gasto de De Alfonso al frente de la Oficina Antifrau y en el 2020 determinó que el magistrado habría cobrado unos 300.000 euros más de forma indebida entre los años 2011 y 2016, año en que fue destituido por el Parlament al filtrarse unas conversaciones grabadas de el con el exministro del Interior Jorge Fernández Díaz contra el gobierno catalán. Según este informe, que complementa uno del 2018, De Alfonso habría cobrado trienios y complementos de calidad que no le corresponderían y señalaba la posibilidad de que fuera perseguible judicialmente. Por eso, la Fiscalía del TCu pidió abrir una investigación.
Según explica el citado diario, cómo es habitual en el Tribunal de Cuentas, cuando se abre el expediente se inicia una fase de instrucción y se designa un responsable para preparar el caso. Este será quien determine la cuantía del menoscabo de dinero público y quien es el responsable de devolverlos.
Antifrau se persona
Una portavoz del OAC ha explicado a Crónica Global que la dirección actual, con el exjuez Miguel Àngel Gimeno, se ha personado en la causa como parte afectada. Desde el organismo dejan claro que no pueden aportar información sobre una causa que está en marcha. Otras fuentes han explicado que se trata de un procedimiento de recobro por los complementos salariales que percibió De Alfonso. Esta cantidad de dinero se centraba en trienios que no le correspondían y un complemento de calidad de 20.000 euros anuales a los que no tenía derecho.
Al dejar Antifrau, el magistrado De Alfonso pasó a ser responsable del juzgado de Vigilancia Penitenciaria 1 de Cantabria, donde tiene la familia. En plena crisis, el Poder Judicial aseguraba que no lo podía apartar de juez porque las irregularidades por las cuales se lo acusaba, a pesar de que gruesas, no fueron en el ejercicio de magistrado. En la Audiencia de Barcelona, Daniel de Alfonso había pedido algún favor a compañeros jueces sobre casos de personas procesadas, que nunca nadie denunció, no obstante, más de uno estaba molesto con él, según algunos testigos, tal como ya explicó El Nacional.cat.
En la comisión del Congreso de los Diputados sobre la operación Kitchen, de espionaje del PP a su extesorero Luís Bárcenas y ahora acabada, se supo que la grabación de la conversación entre De Alfonso y Fernández Díaz fue encargada por el mismo ministro del Interior, según dijo uno de sus cargos policiales y miembro de la policía patriótica que crearon. También se validó que además de querer destruir pruebas de cobros ilegales al PP, también montaron la Operación Catalunya, para desestabilizar el gobierno y líderes soberanistas.