Desde que ha salido de la prisión, el conseller Turull ha insistido en advertir que la represión sobre los políticos independentistas no ha acabado, a pesar de los indultos. Él mismo está siendo investigado por el Tribunal de Cuentas por los gastos de Acción Exterior entre el 2011 y el 2017, aunque en aquel periodo no formaba parte del Gobierno o era conseller de Presidencia. Ahora ha anunciado una Travessa per la Llibertat para denunciar esta situación.
"El 10 de julio empiezo un reto. Una Travessa per la Llibertat. A pie en etapas de Portbou hasta Arnes. Va de agradecimiento a tantos por lo tanto, y de afianzar el compromiso. Quien quiera participar, será bienvenido. Más info, los próximos días," ha tuiteado el exconseller en su cuenta de Twitter.
"Muerte civil"
Este mismo lunes Turull ha advertido en una entrevista en Rac1 que a raíz de la imputación del Tribunal de Cuentas "mañana me puedo encontrar con la muerte civil total". El tribunal se está centrando en pedir sumas millonarias para aquellos que considera parte de la causa del caso Diplocat. "Dejé de sumar lo que me pide el Tribunal de Cuentas porque la suma ya era millonaria", ha asegurado con resignación a Turull, y ha añadido: "Con lo que me piden a mí tengo que trabajar esta vida y la siguiente".
"Maldad e incompetencia"
Después de su salida de la prisión, Turull fue recibido con alegría en su ciudad natal, Parets del Vallès (Barcelona). Centenares de personas se reunieron en el parque de la Linera para darle la bienvenida después de 1.220 días cerrado a la prisión. Turull fue concejal de este municipio entre 1987 y 2003. Después del encuentro con sus vecinos, admitió que se había emocionado "mucho" y explicó que quería que la gente de Parets se sintiera "digna" de él por la solidaridad que le han mostrado durante los años de prisión.
Con todo, desde que ha salido de la prisión advierte del peligro que supone la causa que encabeza el Tribunal de Cuentas contra 41 altos cargos y ex-altos cargos de la Generalitat. En este sentido, asegura que muestra "maldad e incompetencia" por parte de este organismo. Sobre los indultos aseguró ha valorado esta medida de gracia como "un gesto muy pequeño" porque "todavía hay 3.000 personas represaliadas", pero reconoce que "salir de la prisión" les hace estar contentos por sus familias.
Imagen principal, Jordi Turull / Sergi Alcàzar