El vicepresidente de la Comisión Europea Margaritis Schinas se ha mostrado hoy totalmente en contra de sacar militares en la calle para resolver problemas políticos internos, y ha dicho que los países de la UE no lo harán nunca. Schinas ha insistido en que en la UE nunca se pedirá a los militares que repriman protestas internas, tal como ha especulado con hacer el presidente de Estados Unidos, Donald Trump.
Al preguntarle si estaba de acuerdo con el anuncio de Trump, el alto funcionario se ha escudado en el hecho de que no es "un observador experimentado o experto en la política o en las instituciones norteamericanas". Pero ha añadido que llamar a la actuación de los militares en estas circunstancias "no es el estilo de vida europeo".
El posicionamiento de la UE contrasta con lo que hizo el Gobierno español para intentar impedir el referéndum del 1-O, cuando en algunas localidades de Catalunya desplegó efectivos de la Guardia Civil, que es un cuerpo militar y depende en parte del ministerio de Defensa.
La Guardia Civil tuvo una actuación muy destacada en Sant Julià de Ramis (Gironès), donde tenía que votar el president Carles Puigdemont, y en localidades como Callús (Bages).
En contraste con la actuación española, Schinas ha insistido, aludiendo a EE.UU., que "en Europa mantenemos nuestros ejércitos sólo para nuestros enemigos extranjeros".
El diario británico Financial Times ha cuestionado esta afirmación de la UE, y ha recordado que en Europa se han denunciado casos de violencia policial en Hungría, Francia, y en la frontera griega con Turquía.