La ultraderechista Sílvia Orriols se niega a mantener contactos con el resto de partidos de Ripoll, según ha explicado ella misma este miércoles en la primera rueda de prensa que hace desde las elecciones municipales 2023. La líder del partido ultra Aliança Catalana ha asegurado que su formación es la única fuerza que puede ofrecer estabilidad en la ciudad, a la vez que ha afirmado que su lista ganó "con contundencia" y "contra todo pronóstico". Todo, el mismo día que Junts ha seguido presionando para obtener la alcaldía de Ripoll. "O salgo yo o sale la señora Sílvia Orriols", ha soltado la candidata Manoli Vega.
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Es en este contexto que Orriols ha anunciado que no mantendrá contacto con las otras fuerzas políticas (Junts, ERC, PSC, CUP e Independents), además de exigirles que se aparten. "Tendrían que ir al rincón de pensar", ha subrayado. La ultraderechista también ha asegurado que cumplirá "punto por punto" su programa y que se ha fijado como objetivo llegar al Parlament. En este sentido, las próximas elecciones catalanas se celebrarán a más tardar en 2025 — ante la negativa del president Pere Aragonès de adelantar los comicios y la falta de acuerdo en la oposición para sacar adelante una moción de censura.
Junts quiere la alcaldía de Ripoll
Fue este martes cuando ERC, el PSC y la CUP alargaron la mano a Junts para gobernar en Ripoll y evitar que la extrema derecha llegue a la alcaldía. Pero los juntaires se han revuelto contra este tipo de frente antifascista, han contradicho la dirección nacional y ahora quieren encabezar el próximo gobierno municipal. Aunque decidió no aspirar a la alcaldía después de perder gran parte de los concejales que tenía, Manoli Vega y su equipo han dado un golpe de timón para intentar liderar la alternativa — aunque eso pueda traducirse en el ascenso de la ultraderecha al poder.
"O salgo yo o sale la señora Sílvia Orriols", ha amenazado Vega este martes. Es un cambio repentino que se debe a la manera como han gestionado el pacto ERC, el PSC y la CUP, según ha argumentado ella misma. Y es que en Junts se han sentido "excluidos" y "menospreciados" en las negociaciones, después de la polémica empezada por Laura Borràs. Para más inri, la candidata de Junts ha atacado directamente a la inclusión de la CUP dentro del pacto. "También vemos que el programa de la CUP y el de Junts no tienen nada que ver", ha dicho. Por su parte, los anticapitalistas han censurado a Junts por "titubear" ante la extrema dreta en Ripoll.