Un hombre unionista se ha dedicado a echar al suelo cruces amarillas que estaban colocadas en la playa del Port Bo de Calella de Palafrugell. La escena ha provocado estupefacción entre los vecinos y visitantes de la población costera, que no han entendido por qué este individuo realizaba esta acción.
Un grupo de ciudadanos se ha enfrentado con el hombre, que ha empezado a gritarles. ¡"Cállate, gilipollas!", le ha dicho con furia a una mujer que ha querido expresarle que no estaba de acuerdo con su acción.
Una escena de tensión también se ha vivido en Llafranc. Allí, las cruces, en los que se podían leer mensajes como "derechos humanos" o "libertad", también han molestado a los unionistas de Llafranc.