El excandidato de Cs a Barcelona, Manuel Valls, ha utilizado hoy el diario Le Monde para ofrecerse al presidente Emmanuel Macron, para volver a hacer política en Francia. El gran rotativo político de París explica que Valls incluso ya tiene previsto participar el 28 de marzo en un debate político en la Asamblea francesa, para hablar del populismo.
Las declaraciones de Valls a Le Monde no dejan mucho espacio para dudas, en el sentido de que quiere abandonar la política catalana. A la española no ha llegado a entrar, o quizás lo ha intentado y no lo ha conseguido. El excandidato de Cs y actual concejal en Barcelona dice en el diario literalmente que quiere ser "útil" al presidente francés, Emmanuel Macron. "Lo que me fascina en primer lugar es el debate político en Francia, porque es mi vida", señala. "No estoy en el exilio, no he desaparecido y vengo regularmente a París. No he roto con esta ciudad, ni con la política francesa", insiste.
El diario apunta que Valls está calculando los pasos desde hace meses para volver a la política francesa y especula con que podría entrar en el gobierno. "Metódico, el exsocialista ha ido reapareciendo de forma gradual en la escena política francesa en las últimas semanas, y ha multiplicado las exposiciones mediáticas. Siempre con sus temas favoritos. El miércoles 4 de marzo, el hombre que siempre se ha situado a la derecha de la izquierda firmó un artículo en Le Figaro titulado El antisemitismo y el antisionismo se tienen que combatir más que nunca. El 19 de febrero aplaudió el plan de lucha contra el "separatismo islamista" que había presentado Macron la víspera", detalla el diario.
Le Monde pregunta abiertamente a Valls si volverá al gobierno francés, ante de lo que el exprimer ministro se muestra prudente, pero no lo excluye. "Es una elección que sólo corresponde al presidente de la República y al primer ministro", responde. El diario afirma que la vuelta de Valls al gobierno francés sería bien vista por algunos ministros, y especula que le podrían ofrecer Defensa, Exteriores o, sobre todo, Interior, que ya había ocupado cuando era socialista. Añade que en el partido de la República en marcha existe más división de opiniones, y que algunos creen que Valls podría echar electores del flanco izquierdo.
Se da caso de que ayer en un acto en el Centre de Cultura Contemporània de Barcelona con Sociedad Civil Catalana, Valls se mostró decepcionado porque en España "no hay estrategia ante el independentismo" y añadió que el "constitucionalismo político" en Catalunya ha fracasado. Muy decepcionado con el acto del presidente Carles Puigdemont el sábado pasado en Perpinyà, concluyó que si no hay cambios en el unionismo la estrategia independentista "ganará la batalla".