La consellera de Salut, Alba Vergés, ha asegurado este miércoles que "todo hace pensar que Igualada y la cuenca de Òdena tendrán que seguir confinadas". Doce días después del inicio del aislamiento, Vergés ha señalado que la medida era "absolutamente necesaria" viendo cómo han evolucionado los datos del brote de coronavirus en la zona. Lo ha anunciado en una comparecencia telemática ante los grupos parlamentarios, donde también ha explicado que esta mañana se han celebrado varias reuniones para evaluar la situación.
El pasado 12 de marzo la Generalitat ordenó el cierre de Igualada y tres municipios más de la cuenca: Vilanova del Camí, Santa Margarida de Montbui y Òdena. La medida afecta a unos 70.000 habitantes y todo hace pensar que, pasados los primeros 15 días anunciados en un inicio, se tendrá que alargar. La decisión oficial se dará a conocer pronto.
La comparecencia de Vergés se ha llevado a cabo después de que este miércoles haya trascendido un estudio del Departament de Salut que sitúa el pico a finales de abril y el fin del confinamiento en junio. Sobre este punto, Vergés ha evitado pronunciarse, como sí que ha hecho el president Quim Torra, pero sí que ha querido pedir paciencia a la ciudadanía y ha asegurado que "nadie tiene una bola de cristal" ni sabe "con exactitud cuándo empezará a bajar la curva".
Más camas de UCI y primeras 50.000 pruebas rápidas
Por otro lado, la consellera ha aprovechado para anunciar que a partir de este miércoles ya están en funcionamiento el doble de camas de UCI. También ha explicado que un 75% de estas están ocupadas por pacientes infectados por el virus, y que entre 15 y un 20% son para personas de entre 20 y 50 años.
Con respecto a las pruebas de la enfermedad, Vergés ha asegurado que este viernes llegarán hasta 50.000 pruebas rápidas de coronavirus, y también que habrá dos remesas más de tests de unas 100.000 unidades cada una. Una vez lleguen, los primeros irán destinados al personal sanitario, después a las residencias y finalmente a "otros lugares". Justamente con respecto a las residencias, la consellera ha asegurado que hay unos ochenta centros con casos positivos, de los 1.800 que hay en todo Catalunya.