Las manifestaciones franquistas han sido prohibidas por el Gobierno durante la exhumación del dictador Francisco Franco. Eso no ha sido impedimento para que un centenar de manifestantes hayan intentado acceder a las puertas del cementerio de El Pardo-Mingorrubio, donde serán trasladados sus restos. No obstante, se han quedado a 300 metros de su objetivo, porque agentes del Cuerpo Nacional de Policía les han cerrado el paso. No ha habido tensión con la policía, pero sí con la prensa, que han regañado por "manchar el nombre" de su héroe.

Hasta el Pardo se han acercado este jueves por la mañana en torno a un centenar de personas, la mayoría de edad avanzada, con banderas españolas constitucionales, pero también de franquistas y de la Falange. Han gritado vivas a Franco, "Sánchez traidor" y "arriba España otra vez". Los manifestantes han denunciado cómo Franco estaba enfrentando "media España con la otra".

La concentración se ha producido mientras en el Valle de los Caídos se estaba iniciando el proceso de exhumación del dictador. La delegación del Gobierno en Madrid ya había prohibido dos concentraciones franquistas, una convocada por la Fundación Nacional Francisco Franco, "por riesgo de desórdenes públicos". Pero la "nostalgia" ha podido con los franquistas.

Antonio Tejero, autor del golpe de estado de 1981, ha irrumpido a media mañana en la concentración de franquistas en el cementerio de Mingorrubio. Medio millar de personas lo han ovacionado y han coreado su nombre, además de proclamas a favor de Franco. la prensa se ha acercado y los manifestantes la han abucheado.

La Policía Nacional ha decidido hacer un cordón policial para separar la concentración y los medios de comunicación. También han apartado a Tejero de la manifestación. Su hijo oficiará una misa en el cementerio durante la inhumación del dictador.