La policía española ha tenido que intervenir en las puertas del cementerio de Mingorrubio, donde se trasladarán los restos del dictador Francisco Franco, cuando ha llegado el autor del golpe de estado de 1981, el teniente coronel de la Guardia Civil Antonio Tejero.
La policía lo ha apartado de un grupo de personas que lo ha ovacionado y ha coreado su nombre, además de proclamas a favor de Franco.
La presencia del golpista ha provocado momentos de tensión con los cámaras y fotógrafos, que han sido abucheados por los concentrados. La Policía Nacional ha decidido hacer un cordón policial para separar la concentración de los medios de comunicación.