Tensión en el Gobierno. La consellera de Presidència, Laura Vilagrà, ha acusado a Junts de debilitar la posición del Govern en la mesa de diálogo. "No es una actitud adecuada", ha dicho la consellera sobre las reticencias de la formación sobre la negociación con el Gobierno.
"Plantear que la mesa de negociación no tiene sentido cuando todavía no hayamos salido ni a jugar es como si estás a punto de jugar un partido, estás en el autobús y ya dices que perderás", ha reprochado en una entrevista de Europa Press. Durante las últimas semanas, varios dirigentes de Junts han cargado contra la mesa de diálogo y han pedido recortar el margen de dos años que han dado a la negociación con el Estado español.
Una hoja de ruta clara
El acuerdo de Govern entre ERC y Junts es muy claro, según Vilagrà: da dos años para apostar por el diálogo. "Es clarísima la hoja de ruta para los próximos años", ha dicho. Por eso ha exigido a la formación presidida por Carles Puigdemont que respete el acuerdo y afronte la negociación con toda la fuerza para obtener el mejor resultado posible.
Nosotros no somos de los que decimos que perderemos antes de empezar a jugar el partido. No sería una actitud adecuada, la actitud adecuada es la del ganador", ha asegurado la consellera, que cree que la actitud de Junts debilita la posición de la Generalitat delante del Gobierno.
El Gobierno está "cohesionado"
A pesar de las discrepancias sobre la mesa de diálogo, Vilagrà ha garantizado que el Govern está "cohesionado". No hay problemas de entendimiento, de manera que espera que se mantenga la confianza que hay hasta ahora entre los miembros del Ejecutivo.
A la negociación con el Gobierno se plantearán propuestas "alternativas" para encontrar una solución al conflicto. Pero el Govern insistirá en la defensa del referéndum pactado, una cosa posible dentro del marco constitucional, según la consellera. Igualmente, Vilagrà no ha podido avanzar si hay una alternativa al referéndum: "Es un asunto que tenemos que hablar a fondo, tenemos que establecer cuáles podrían ser las posibilidades. Obviamente a la vida las cosas casi nunca son blanco o negro".
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el de la Generalitat, Pere Aragonès, pactaron reanudar la mesa de diálogo la semana del 13 de septiembre. Una reunión que servirá sobre todo para preparar la negociación más que para obtener resultados. "Una negociación política de esta magnitud requerirá una preparación, un procedimiento y unas bases. Por lo tanto, ya os digo que el primer día no llegaremos mucho lejos", ha explicado.
"Lo que haremos en los primeros compases de estos encuentros y de esta negociación es establecer cuál es el marco, establecer las posiciones, cuál es el interés de cada parte y después acabar haciendo las propuestas concretas y las alternativas concretas", ha añadido. Hay que recordar que aquí no se conseguirán reivindicaciones como los traspasos de competencias, ya que estos asuntos se abordan a la comisión bilateral. Una comisión bilateral que "no puede ser una moneda de cambio", ya que la bilateral es para cuestiones económicas y la mesa de diálogo para cuestiones políticas.