El primer juicio contra el comisario jubilado del Cuerpo Nacional de Policía (CNP) y en prisión provisional, José Manuel Villarejo, se celebra este viernes en un juzgado de Madrid, por presuntos delitos de calumnias y denuncia falsa contra el ex director del Centro Nacional de Inteligencia (CNI) Félix Sanz Roldán, y contará con la declaración por videoconferencia de la ex amiga de Juan Carlos Corinna Larsen desde Reino Unido.
El juicio, que está previsto que se ventile en una única sesión este 15 de enero, empieza a las 10 horas en el Juzgado de lo Penal Número 8 de Madrid, después de que se haya aplazado hasta en cuatro ocasiones debido a la pandemia de coronavirus y a pesar de los trastornos causados por 'Filomena'.
Será la primera vez que Villarejo se siente en el banquillo de los acusados, aunque podría no ser la última, a juzgar por las dimensiones del 'caso Tándem' y sus muchas ramificaciones, en las que se investigan los trabajos del ex comisario.
Dos años de cárcel
Por este caso, la Fiscalía Provincial de Madrid le pide un total de dos años de cárcel: un año de prisión, la inhabilitación especial para el ejercicio del derecho al sufragio pasivo durante el tiempo de la condena, y 20 meses de multa con una cuota diaria de 20 euros, por el delito de denuncia falsa; y otro año y la misma inhabilitación, por el de calumnias.
El juicio arrancará con la declaración de Villarejo, que acudirá presencialmente pese a las consecuencias del temporal de nieve. Después, comparecerá -también de forma presencial- Sanz Roldán, a propuesta del Ministerio Fiscal.
Cabe recordar que Sanz Roldán está obligado a declarar, aunque podría intentar evitarlo acogiéndose al artículo 418 de la Ley de Enjuiciamiento Criminal, donde "se exceptúa el caso en que el delito revista suma gravedad por atentar a la seguridad del Estado", entre otras razones.
A continuación, y a instancias de la defensa, será el turno de los testigos, empezando por Larsen, que intervendrá por videoconferencia desde Reino Unido. Para evitar posibles fallos de conexión este viernes, la semana pasada se llevó a cabo un "ensayo" que concluyó de forma exitosa.
Amenazas a Corinna
La comparecencia de Larsen guarda relación con el delito de calumnias. Los hechos se remontan al 5 de junio de 2017, cuando Villarejo dijo en el programa 'Salvados' de La Sexta que Sanz Roldán había amenazado de muerte a la empresaria germanodanesa "siendo consciente de que no era cierto", según el escrito de acusación de la Fiscalía de Madrid.
En una declaración jurada ante notario, Larsen acusó a Sanz Roldán de estar detrás de una "campaña" en su contra y de amenazarla personalmente en un hotel de Reino Unido en el año 2012, después de que Juan Carlos tuviera el accidente en Botsuana.
Tras Larsen, testificarán el que fuera jefe de la Unidad de Delincuencia Económica y Fiscal (UDEF) José Luis Olivera y la ex responsable del Centro de Inteligencia contra el Terrorismo y el Crimen Organizado (CITCO) y actual jefa de Gabinete de la ministra de Defensa, Esperanza Casteleiro, ambos a instancias también de la defensa.
Sin embargo, el juez ha rechazado las testificales del ex Director Adjunto Operativo (DAO) de la Policía Nacional Eugenio Pino; del ex secretario de Estado de Seguridad Francisco Martínez y de cuatro periodistas. El magistrado se opone a practicar estos interrogatorios al entender que lo que podrían acreditar los dos primeros lo hará el propio Olivera y que el conocimiento de los segundos es de fuente indirecta o lo puede atestiguar Larsen.
Los "tentáculos" de Villarejo
El otro eje del juicio contra Villarejo será la denuncia presentada el 1 de junio de 2017 por Villarejo contra Sanz Roldán y un periodista por un artículo sobre sus "tentáculos" en el mundo judicial que se ilustraba con una fotografía suya, según denunciaba, obtenida en una operación antiterrorista en la que había participado como agente encubierto.
En la imagen aparecía Villarejo bajando de un avión en la zona de pistas del aeropuerto de Melilla y, siempre según su denuncia, formaba parte de un dossier que el CNI habría facilitado al periódico 'El País' con el conocimiento y la autorización de Sanz Roldán, lo cual sería constitutivo, en su opinión, de un delito de descubrimiento y revelación de secretos y de un delito de colaboración con actividades de organizaciones terroristas.
La denuncia no fue admitida a trámite y el juez ordenó el archivo de las actuaciones. Villarejo recurrió en reforma y en apelación, sin ningún éxito, y finalmente la Fiscalía y la Abogacía del Estado acabaron emprendiendo acciones contra él por denuncia falsa en los juzgados de Madrid.