Un habitual de las comisiones de investigación ha vuelto al Congreso de los Diputados. El comisario jubilado de la policía española José Manuel Villarejo ha comparecido para contestar a las preguntas sobre el 17-A de Barcelona y Cambrils. Él es quien hace dos años atribuyó los atentados a un error del CNI, que “calculó mal las consecuencias de dar un pequeño susto a Catalunya”. Hoy se ha reafirmado a medias en esta tesis, con un discurso en el que ha ido dando bandazos y que ha querido matizar. “Nunca dije que el Estado lo provocó, he dicho que pudo evitarlo”. Y, concretamente, ha apuntado a la colaboración “graciosa” entre los Mossos d’Esquadra y los servicios de inteligencia y de seguridad españoles. “El atentado se pudo evitar”, ha dicho nada más empezar.

 

“Se podría perfectamente haber evitado simplemente avisando a los Mossos. Si se hubiera avisado adecuadamente, automáticamente se hubieran detenido [después de la explosión en Alcanar]”, ha defendido más tarde. “Creo que se trata de una imprudencia o una negligencia, más que un deseo de no evitarlo”, ha esgrimido. “Nadie informó a los Mossos que Es Satty estaba siendo monitorizado”, ha señalado. Posteriormente, ha tildado de “error y culpa” el hecho de que se produjeran los atentados. “Dolo bajo ningún concepto”, ha insistido. “Creo que hubo un error importante de no haber valorado mis advertencias de 2015 y la culpa de ocultarlo todo para que no trascendiera el error que se había cometido de dejar de controlar ese imam que en teoría tenían monitorizado”, ha remachado.

Asimismo, después de que la semana pasada el exdirector del CNI, Félix Sanz Roldán, negara que Abdelbaki es Satty, imam de Ripoll y cerebro de los atentados, fuera confidente suyo, José Manuel Villarejo le ha llevado la contraria. “Que Es Satty era colaborador del CNI es evidente por todo lo que ha salido”. “Era colaborador porque cobraba. Es alguien que, dada su condición de delincuente o con capacidad de meterse en esos ambientes, informa a cambio de dinero”. Incluso ha afirmado qeu fue “agente doble o triple”. “Alguna prueba o dato fehaciente? O son conclusiones a las que usted llega?”, le ha preguntado el diputado de Bildu Jon Iñarritu sobre el vínculo entre Es Satty y el CNI. “Hay tantas evidencias que me recuerda lo que decía Groucho Marx, que «Es verdad lo que van a haber tus ojos o lo que yo te voy a contar»”.

“No dediqué todo el tiempo y esfuerzo a intentar que me creyeran”

José Manuel Villarejo  ha relatado que en 2015 alertó del riesgo de que se cometiera un atentado y se ha mostrado convencido de que “una de las cosas” por las que fue detenido fue que en septiembre de 2017 habló sobre esta cuestión con José Luis Olivera (jefe del Centro de Inteligencia contra el Terrorismo y el Crimen Organizado, CITCO) y con el juez Fernando Andreu. “Yo soy un fracasado, porque no dediqué todo el tiempo y esfuerzo a intentar que me creyeran cuando despreciaron esas informaciones”, ha reconocido. “Hice notas inteligencias en la que aviso que hay una fuente que me dice que tenía posibilidad de tal”, ha relatado. No sabía que era Es Satty, pero su informador le especificó que era alguien que había estado en Bélgica, que era imam y que trabajaba para los servicios secretos marroquíes. “Mi fuente jamás me dijo que era Es Satty, él no lo sabía, necesitaba ir a Catalunya [para indagar más]”, ha señalado.

“No sé por qué hay que mantener el secreto si no hay nada que ocultar”

Sobre la desclasificación de los documentos del 17-A, que de momento el Gobierno no ha llevado a la práctica, una imposibilidad que ahora atribuye a un error formal, ha sido claro: “No sé por qué hay que mantener el secreto si no hay nada que ocultar, no sé por qué no lo han desclasificado”. Y ha vaticinado que “no las van a desclasificar nunca”.