"¡Viva el Rey!". Así ha acabado el controvertido acto de entrega de despachos a los nuevos jueces.
La LXIX promoción de la Escuela Judicial será recordada como la promoción de la Covid-19, pero sobre todo como la de la ausencia del Rey, que en 20 años no había fallado nunca. La judicatura ha mostrado su firmeza contra el gobierno de Pedro Sánchez, a quien se atribuye el feo de Felipe VI a los jueces. Y eso ha provocado otras ausencias destacadas, como la del presidente del TC o de 15 de los mismos nuevos graduados, que no han recogido su despacho.
El gesto inédito del acto se ha producido al final, cuando el vocal del CGPJ José Antonio Ballestero se ha levantado desde la segunda fila del patio de butacas y ha gritado "¡Viva el Rey!".
El auditorio le ha seguido con un "¡viva!" mostrando el apoyo a Felipe VI en un acto marcado tradicionalmente por la pomposidad y que este año ha sido austero y con una tensión evidente, que se reflejaba en las caras de los máximos exponentes de la judicatura española.