Aparte de dejar libre al president en el exilio, Carles Puigdemont, y suspender su proceso de extradición hasta que la justicia europea resuelva las cuestiones prejudiciales, la Corte de Apelación de Sassari también ha rechazado que Vox se persone en el caso.

La escena ha sido bien curiosa, ya que en un primer momento, los responsables de Vox han entrado en la sala de la vista y han expuesto sus argumentos para estar allí. El fiscal se ha posicionado en contra de su presencia y el tribunal lo ha confirmado pocos minutos después: no tenían derecho a estar allí. Una vez fuera, los letrados del partido se han esperado en el pasillo hasta que ha terminado la vista.

 

Como es obvio, esto ha provocado la ira de Vox, que rápidamente se ha presentado ante los medios de comunicación para denunciar la situación. "Se están vulnerando nuestros derechos fundamentales como acusación popular. Vox ha sido la única acusación popular en este proceso. Creemos que tenemos que estar aquí personados para defender la unidad de España y la soberanía nacional", ha afirmado la responsable judicial del partido, Marta Castro.

Castro ha añadido que el Tribunal Supremo ha sido "tajante" en cuáles son las condiciones con respecto a la acusación popular. "El derecho a la acusación popular nos permite personarnos contra cualquier procedimiento que tenga relación con el mismo. La orden de detención europea lleva causa directa de la causa que se está siguiendo en el Tribunal Supremo", ha insistido Castro citando el artículo 110 de la ley de enjuiciamiento criminal.

Negacionismo jurídico

Por otra parte, la responsable jurídica de la formación de extrema derecha ha reivindicado que, como dice el alto tribunal, "no existe vinculación entre la cuestión prejudicial y la decisión que el tribunal puede y tiene que tomar sobre la extradición de Puigdemont, Comín y Ponsatí".

"No pueden ampararse en la presunta inmunidad parlamentaria para evadir la justicia española y no presentarse ante el Tribunal Supremo", ha dicho Castro, añadiendo que Europa no puede ser utilizada para "evadir la justicia y las consecuencias de los graves delitos por los cuales están procesados".

Puigdemont ha quedado en libertad después de que la Corte de Apelación de Sassari haya decidido suspender sine die el procedimiento de extradición que tenía abierto. El tribunal ha argumentado la suspensión a la espera de que el Tribunal de Justicia de la UE decida sobre las cuestiones prejudiciales presentadas por el juez Pablo Llarena y hasta que el Tribunal General de la UE resuelva sobre la demanda de medidas cautelares que presentó la semana pasada el president para recuperar la inmunidad.

Las cuestiones pendientes

Los procedimientos pendientes de resolución a los cuales hace referencia el tribunal son, por una parte, las cuestiones prejudiciales que presentó el juez Llarena ante el TJUE a raíz de la decisión de la justicia belga de no extraditar al conseller Lluís Puig.

Según el tribunal de Luxemburgo, aquellas prejudiciales han dejado en suspense las euroórdenes hasta que la justicia se pronuncie. Según el juez instructor, sólo ha quedado en suspense en Bélgica pero no en el resto de países.

El segundo tema pendiente de resolución se refiere a las medidas cautelares que el viernes pasado presentó la defensa de Puigdemont ante el Tribunal General de la UE, reclamando que se le devuelva la inmunidad dado que existe un riesgo que sea detenido.

 

Imagen principal: los responsables jurídicos de Vox, en Sassari (Cerdeña) / Foto: Europa Press